Durante octubre nos rodean un sinfín de campañas para concientizar sobre la importancia de la salud ginecológica y la lucha contra el cáncer de mama. Aquí te decimos qué puedes hacer para unirte a la causa de manera activa.
Este octubre como todos los años desde 1985 se conmemora el mes de la lucha contra el cáncer de mama, lo cual viene acompañado de campañas de salud y eventos de caridad para incrementar la conciencia alrededor de la enfermedad y para reunir fondos para la investigación de la causas, diagnósticos, tratamientos y posibles curas.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, el cáncer de mama se ha vuelto el tipo de cáncer más común, con más de 2,2 millones de casos detectados el año pasado, provocando alrededor de 685 000 muertes de mujeres. Es por ello que es tan importante que volvamos la autoexploración parte de nuestras prácticas habituales, no sólo durante este mes.
Entonces hablemos de qué otras cosas podemos hacer para volvernos más activas en la lucha contra el cáncer de mama además de donando, revisándonos y escuchando.
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1. Acompaña a tus amigas y familiares a sus consultas
Una de las principales razones por las que no solemos ir a nuestra revisión anual con la ginecóloga es por miedo. Hay que aceptar que ser revisadas en un consultorio médico nos suele poner en un papel bastante vulnerable y pasivo; eso puede provocar pánico en muchas de nosotras. Sin embargo, ¡no tenemos que pasar por esto solas! Si bien podemos ir acompañadas a nuestra consulta por nuestra pareja sexoafectiva, también podemos asistir con nuestras amigas o familiares cercanas, así como acompañarlas a ellas cuando les toque. Este ritual le quitará un poco lo tenebroso a la revisión y las hará sentir más seguras en el proceso.
2. Denuncia la violencia ginecológica
La violencia ginecológica es una forma específica de violencia contra las mujeres y otras personas con cuerpos con la capacidad de gestar que es mucho más común de lo que imaginamos. Esta violencia puede manifestarse de manera física o psicológica. Si tu doctor o doctora te juzga por el número de parejas sexuales que has tenido, si no escucha tu incomodidad o dolor en medio de la inspección, si te revictimiza por haber vivido cualquier tipo de violencia sexual, puedes denunciarle. Es importante que recordemos que no estamos solas y que no tenemos que soportar malos tratos con tal de no incomodar a los demás.
3. Deja de usar fraseos dañinos para hablar de la enfermedad
Para muchas personas con cáncer, en especial para aquellas que se encuentran en etapa terminal, las alusiones al lenguaje bélico para hablar sobre la enfermedad pueden ser dolorosas. Los famosos “perdió la batalla contra el cáncer” o “es muy valiente enfrentarse a la enfermedad” tratan de evocar lo difícil que es vivir con cáncer, pero pueden ser contraproducentes. Es duro imaginar que, en esa narrativa, quien muere de cáncer no luchó lo suficiente cuando, en realidad, la supervivencia en muchas ocasiones sale de su control.
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4. Recuerda que el cáncer de mama no sólo afecta a las mujeres
Aunque el cáncer de mama afecta primordialmente a las mujeres, los pocos hombres que lo padecen suelen vivir negligencia y retraso en el diagnóstico, por lo que el diagnóstico en muchos casos no es otorgado sino hasta la etapa clínica III o IV, cuando la enfermedad es mucho más delicada de tratar. Por otro lado, las personas no binarias asignadas como mujeres al nacer y los hombres trans también pueden padecer cáncer de mama. Es crucial que los servicios de salud sean inclusivos para tratar a todas las personas con esta enfermedad, sin importar su identidad de género.
5. Escucha las historias de quienes viven y sobreviven al cáncer de mama
Es muy importante que reconozcamos que por más que investiguemos, leamos y queramos apoyar a la causa, nuestra perspectiva será muy diferente a la de alguien que padece cáncer de mama. Por ello debemos practicar una escucha activa que nos permita acompañar desde la empatía a las personas a nuestro alrededor que lo necesiten y soliciten.
¿Qué más agregarías tú a esta lista de cuidados y acompañamiento?