Las hermosas playas del Caribe mexicano sufren. La blanca y suave arena de la Riviera Maya, Cancún, Tulum, Puerto Morelos, Playa del Carmen, Mahahual, Isla Mujeres y Cozumel es sepultada bajo un grueso manto de algas de color café y olor putrefacto. El mar, antes de un precioso azul turquesa, parece lodo, y el aroma de la costa se contamina de un peste nauseabundo. Esto es lo que provoca el arribo masivo de sargazo en el Caribe mexicano, lo que muchos expertos ambientalistas consideran una “catástrofe ambiental” que no solo afecta al medio ambiente sino al turismo —la principal actividad económica de Quintana Roo— y a varias especies marinas que luchan por sobrevivir.
Aunque el sargazo representa un reto ambiental y económico, para el presidente Andrés Manuel López Obrador es un “asunto menor” que se ha magnificado para afectar a su gobierno.“Este problema heredado, como otros, se han magnificado para cuestionar al nuevo gobierno, pero no hay motivo para preocupación, este es un centro turístico, una zona turística excepcional”, dijo en conferencia de prensa este lunes 24 de junio.
Hablemos del sargazo y el plan del gobierno López Obrador para combatirlo.
Lo que debes saber sobre el argazo en el Caribe mexicano
Primero: ¿qué es el sargazo?
Foto: Cuartoscuro
Es un macroalga parda (de tonalidades café o verde oscuro) que habita en la suspensión de los mares y se desplaza por las corrientes de los océanos. Tiene la facilidad de crecer muy rápido (duplica su biomasa en menos de 20 días en condiciones favorables) y no es dañina por sí misma (de hecho, algunos peces lo utIlizan como lugares para desove).
¿De dónde viene el sargazo en el Caribe mexicano?
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Su origen es aún incierto. Sin embargo, se cree que la crisis climática mundial ha influido en el cambio de corrientes marinas que empujan al sargazo desde Brasil.
La presencia del sargazo en el Caribe mexicano ha ido en aumento desde 2014 y este año se espera la crisis más grande, pues las cantidades de alga que han llegado superan cualquier expectativa. Durante el fin de semana del 18 y 19 de mayo, la Secretaría de Marina recolectó 10 toneladas en 12 costas turísticas de Quintana Roo.
¿Cómo afecta sargazo en el Caribe mexicano?
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El problema es cuando llega a la playa y se pudre. Entonces genera lixiviados, ácido sulfídrico y arsénico que puede contaminar los suelos y los ecosistemas (de ahí viene el olor fétido).
También es problema porque en grandes cantidades representa una amenaza para varias especies marinas. Según un estudio de la UNAM publicado recientemente, 78 especies de fauna marina murieron a causa del arribo masivo del sargazo el Caribe mexicano. De estas 78, el 59% eran peces, el 28 eran crustáceos, el 5 eran equinodermos (estrellas de mar), el 4 eran moluscos y el resto eran poliquetos. Además, según dijo a El País Elisa Rodríguez, investigadora de la UNAM quien lleva más de 20 años de trabajo en los arrecifes, de junio pasado a la fecha, el 40% de los corales se han perdido. Y, si no se toman medidas a gran escala y de manera urgente, esta crisis podría acabar con ecosistemas en más de 15 países —otras zonas afectadas son Trinidad y Tobago, San Martín, Puerto Rico y Barbados—
Esto es por los efectos de las altas concentraciones de amonio, fósforo y ácido sulfhídrico que provoca; pero sobre todo porque las grandes cantidades de alga flotando sobre el mar impiden el paso de la luz y reducen la concentración de oxígeno.
Además, el sargazo en el Caribe mexicano afecta directamente a la actividad turística, pues las playas sucias, el olor fétido, los gases (que pueden ser tóxicos) y los insectos que provocan irritaciones en la piel, desincentivan a viajeros que van en busca de las prístinas aguas de Quintana Roo. Según reportes del Consejo Mundial de Viajes y Turismo, Quintana Roo representa el 7,1% del PIB turístico de México; sin embargo, a comparación de 2018, bajó un 30%.
Las causas del fenómeno del sargazo en el Caribe mexicano
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La crisis climática es el factor número uno. Ambientalistas coinciden en que el aumento de temperatura del agua y la sobrefertilización de los mares (a causa de la sobreexplotación turística de las playas y el mal control de aguas residuales), provee las condiciones climáticas ideales para la reproducción de la alga.
Las soluciones a la crisis del sargazo en el Caribe mexicano
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Al principio se hizo frente solo desde el nivel privado. Los hoteles de las zonas afectadas se dedicaron a enterrar o remover el sargazo de las playas (con las manos y maquinaria) y de altamar (con barcas y con el primer prototipo de barco sagacero, el Ruffo I que recoge 20 toneladas por hora); sin embargo, las cantidades ya son incontrolables.
A principios de mayo, el presidente Andrés Manuel López Obrador declaró que la Marina encabezará el plan. El Gobierno inició la jornada “Todos contra el sargazo” y envió a más de mil funcionarios a las labores de limpieza, así como a una flotilla de 5 embarcaciones para realizar estudios. Según reportó El Universal, el primer barco enviado por la Secretaría de Marina (Semar) para atender el problema llegó a Cancún el 14 de este mayo.
Se ha destinado 62 millones de pesos para limpieza, pero los recursos han sido insuficientes y se espera que se aprueben 218 millones más. También se espera la resolución del dictamen para atender la problemática del sargazo en el Caribe mexicano. Este no entrará en los periodos extraordinarios que tendrá el Senado en mayo y junio, así que su discusión y aprobación será hasta septiembre, cuando arranque el nuevo periodo ordinario.
Según El Universal, este dictamen tiene como objetivo incluir al sargazo dentro de la Ley General de Protección Civil (LGPC) para que sea considerado como emergencia y desastre natural (y se acceda a más recursos financieros para combatir el problema). Además, se discutirá la inclusión del fenómeno del sargazo en la política nacional del cambio climático.
Esto es importante porque más allá de detenerlo para que no llegue a las costas (o aprovecharlo como composta o para fabricar combustibles o polímeros), hay que solventar el problema de la contaminación en las aguas del Caribe y las malas prácticas que favorecen a la crisis climática. Por ejemplo, según la Comisión Nacional del Agua, solo el 38% de aguas residuales de Quintana Roo son tratadas. Para ello se ha creado un comité de expertos, coordinado por la UNAM y formado por oceanólogos, botánicos e ingenieros.
Lo bueno es que, a pesar del problema del sargazo en el Caribe mexicano, aún tenemos la laguna de los siete colores para admirar la belleza natural de nuestro país.