Escápate a volar en globo en Tequisquiapan
Por: Verónica Chávez Aldaco
Este destino, a escasas dos horas y media del DF, se ha hecho famoso por su ruta del vino y queso, sin embargo, hay otros secretos que te vamos a contar.
Viaje en globo
Fue en 1783, en un día de campo, que los franceses Joseph-Michel y Jacques-Étienne Montgolfier, tras “un accidente” (una mascada que se voló y el calor de una fogata encendida la elevó), descubrieron esa sencilla ley de la física que hace a un objeto esférico impulsado por aire caliente, elevarse… Eso nos cuenta Juan Rivas, nuestro capitán, al tiempo que nos extiende un vasito con sidra para celebrar nuestro buen viaje en Capitán Maravilla, el globo aerostático del que acabamos de descender –así lo dicta la tradición. Pero empecemos por el principio…
Hay que madrugar, la idea es ver el amanecer queretano arriba del globo, así que si sales del DF debes partir por lo menos a las 4:30 de la madrugada para estar antes de las 7 en las instalaciones donde te llevarán al globo. Con un máximo de 10 personas estará listo para despegar.
vuelo en globo
Sentir un poco de vértigo es parte de la emoción (el globo se eleva a 400 metros de altura), pero no dudes mirar hacia abajo: la vista muestra los campos de siembra, vaquitas pastando y un bello horizonte enmarcado por montañas pintadas de naranja al empezar a salir sol. Está por demás decir que tras la aprensión del inicio, viene la calma: el vuelo es ligero (no hay movimientos bruscos), sin cables de luz a la vista ni ruido. La experiencia se vuelve relajante y se agradece sentir el viento limpio y fresco en la cara. La hora completa que dura el vuelo se va como agua.
Experimenta Aventura, Vuelo en globo aerostático, $1,900 por persona, incluye desayuno. (La manera de comprar es muy sencilla: puede ser vía telefónica 5292 5707, o en su página web: experimenta.com.mx).
Punto de partida: Niños Héroes, San Juan del Río, Centro, Tequisquiapan, Querétaro. –Experimenta no incluye la transportación del DF a Tequisquiapan ni el regreso–.
Viñedeando ando
–Viñedos La Redonda–
viñedos.
La sidra nos deja picados, así que la siguiente parada es a los viñedos La Redonda, es casi un pecado no pasar por una copita de vino (o varias) y aprovechar para dar un paseo por los campos de vid y aprender un poco sobre vinos mexicanos.
La guía nos cuenta que la zona del bajío tiene el clima propicio para cosechar uvas de distintas variedades: Cabernet Sauvignon, Merlot, Chenin Blanc, Ugni Blanc, Moscatel, Tempranillo y Trebbiano (todas traídas de Francia, Italia y España) son las que aquí se encuentran.
En La Redonda cuentan con tres colecciones: La Redonda, con vinos jóvenes que no entran en barrica de madera (se añejan durante tres meses en barrica de acero inoxidable) y su sabor es ligero. Orlandi, estos entran en barrica de madera y pasan ahí por lo menos tres meses, logran un leve sabor ahumado. Y, finalmente, los Sierra Gorda que pasan por lo menos seis meses en barrica de madera, sus sabores a madera, especias y frutas es el más franco de todos. Aunque nos cuentan que el paladar mexicano prefiere los primeros, te recomiendo que te animes con los últimos, son los más ricos, por mucho.
Viñedos La redonda, (Cortesía.)
Si tienes chance de ir en época de vendimia, en el mes de julio, podrás pisotear uvas como en las películas. O asiste a sus festivales para vivir un ambiente de fiesta de pueblo con antojitos mexicanos, música y kermés. Hasta puedes programar eventos privados como bodas.
Visita a La Redonda: Carretera San Juan del Río a Ezequiel Montes, Km 33.5, Ezequiel Montes, Querétaro, lun-vie 11-16 h, cada hora, sáb y dom, 11-17 h, cada hora, $999, [email protected]
Opción TuriTour: Con salidas en el DF (Auditorio 8-8:10h, Ángel de la Independencia 8:10-8:20 h, Glorieta Colón 8:20-8-25 h, Hemiciclo a Juárez 8:25-8:30 h, Zócalo 8:30-8:40 h), Oficinas: Guillermo Prieto 60, San Rafael, Cuauhtémoc, 5703 3313, $950-$600 (niños 4-12 años, Inapam, estudiantes mexicanos).
La visita a los viñedos incluye: Recorrido con guía especializada, menú degustación de cuatro tiempos y una copa de vino en cada platillo.
El secreto mejor guardado
–Restaurante 5DMayo Experimental–
Restaurante 5DMayo
En una casona del siglo XVIII se encuentra esta pequeña joya queretana que, desde la entrada, hace honor a su nombre: su color rosa encendido, maderas naturales, objetos de diseño (como una antigua máquina de escribir) y estantes con botellas de vino, te invita a experimentar desde la vista.
Con la carta de alimentos viene la verdadera experimentación, y como sugiere Natalia, socia y enóloga del lugar, «aquí hay que probar hasta lo que habitualmente no nos gusta». Así, con mente abierta viene la diversión. Empezamos con una crema con texturas leguminosas y camarón. Espesita y con un sabor contundente abrió paso a un espagueti de chilacayote frito con cerdo salteado al membrillo –cabe mencionar que el menú es estacional, así que cambia con cada temporada–, su original sabor nos hace intentar descubrir cada ingrediente que lo compone, la carne es tan suave que se deshace al meter el tenedor.
Le sigue un filete de res con frutos del bosque y reducción de vinagre balsámico, su gusto es predominante, fuerte y con mucho carácter al mismo tiempo que recuerda un plato casero. Finalmente, llega el postre: una perla de chocolate semiamargo y pimienta rosa con terroso de arroz inflado. Una delicia exótica que pasa mejor con un expreso doble o agüita de lavanda.
Restaurante 5DMayo 1
Mención aparte merecen sus vinos, su muy cuidada y exclusiva carta tiene un sudáfricano (que difícilmente podrás encontrar en otro lado) llamado Stark-Condé un Syrah que no tiene igual: especiado, con sabor a frutos rojos y madera. Simplemente delicioso. Vale la pena pedir botellas para la cava personal, un gran hallazgo y, claro, una gran experiencia en el paladar.
Restaurante 5DMayo Experimental, 5 de mayo 128, Colonia Centro, Santiago de Querétaro, Querétaro. Menú de degustación, $1,000. OJO: SÓLO CON RESERVACIÓN
¿Te lanzas a esta experiencia?
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