A partir del 12 de junio, dos mil cuatrocientos millones de personas posarán sus ojos en Brasil y en todo lo que ocurra con un balón. Pero dos días antes, el 10 de junio, un mercado que generó ganancias en 2013 por 21 mil 530 millones de dólares tendrá su propio “carnaval” de tres días: la Electronic Entertainment Expo 2014 (E3).
La E3 es la feria de videojuegos más importante del continente americano y la segunda en importancia mundial después del Tokyo Game Show. En ella, las principales compañías de software y hardware se reúnen en un evento exclusivo para prensa y ejecutivos de la industria con el fin de presentar a los consumidores sus novedades.
Así, del 10 al 12 de junio Los Angeles se convertirá en el epicentro de un “carnaval” que en esta edición estará marcado por la incertidumbre que han provocado los problemas que cada una de las tres principales productoras de hardware han experimentado en el último año.
EL CASO DE SONY
Tras la glamorosa presentación de su PlayStation 4 (PS4) en la E3 del año pasado, Sony ha ido en declive en sus finanzas hasta llegar a niveles cerca de la bancarrota, de acuerdo a su último reporte fiscal publicado el 6 de febrero pasado.
Pero el negocio de los videojuegos es uno de los pocos que ha representado ganancias para la compañía, al reportar ingresos reales por 4 mil 350 millones de dólares hasta diciembre de 2013, un alza de 64.6% respecto al año anterior debida en gran parte al éxito que ha tenido su PS4 (lanzado el 15 de noviembre de 2013 en Norteamérica), lo que ha convertido a Sony en la líder de la actual generación de consolas (por ahora).
[Lee aquí por qué Sony le ganó la batalla a Microsoft]
EL CASO DE MICROSOFT
Por su parte, la historia del Xbox One (lanzado el 22 de noviembre de 2013 en América) ha estado plagada de malas decisiones, críticas, confusiones y “giros de timón” que comenzaron con el elevado precio de la consola ante los ojos del consumidor, y continuaron con sus exageradas restricciones para el uso de juegos usados (de las cuales se arrepintió Microsoft posteriormente) para concluir con su relanzamiento sin Kinect (que en un principio se dijo sería un accesorio “clave” para la consola) el 9 de junio de 2014.
EL CASO DE NINTENDO
Nintendo, la depuesta reina de la industria, no se ha salvado del torbellino que afecta a la industria de los videojuegos actualmente, pues su Wii U (lanzado el 18 de noviembre de 2012) no ha terminado de agradar a los consumidores, lo que se tradujo en una reducción de sus proyecciones de ventas para el fin del año fiscal 2013 (que pasaron de nueve a 2.3 millones, de acuerdo a su informe anual), y en la rebaja del sueldo de su mesa ejecutiva, incluyendo a su presidente y al mismo Shigeru Miyamoto, creador de Mario Bros.
[Checa la entrevista que le hicimos al
presidente de Nintendo en la E3 pasada]
Ante este contexto negativo, la E3 2014 será determinante para el futuro inmediato de la industria, pues si bien el año pasado la presentación de las nuevas PS4 y Xbox One se llevó todos los reflectores, este año los consumidores quieren que haya más énfasis en lo que la mueve realmente: los juegos
