Suficiente es que pasen días y noches sin sexo nomás porque uno no tiene a nadie al lado para hacerle piojito, como para que además la suerte nos haga una mala jugada. Existen un montón de supersticiones que prometen noches incansables de amor y otras que hacen que nos cargue el payaso.
Así que para evitarles la molestia, les pasamos al costo algunas de las supersticiones que podrían acabar con su vida sexual:
¡Salud!
Quizá ésta es la superstición más famosa: cuando brindes con alguien, debes mirarlo a los ojos o de lo contrario tendrás siete años de mal sexo. Y pues, ¿qué tanto cuesta fijar la mirada en el otro? No vaya a ser que por eso uno viva las mieles de la amargura y se quede sin darle mantenimiento a la maquinaria durante tanto tiempo.
Buenas noticias para los zurdos
Además de mirar al otro cuando choquen sus vasos o copas, hay que hacerlo con la mano izquierda. Esto no sólo asegura tener sexo, sino que además sea bueno. Porque una cosa es que uno se eche una canita al aire y otra es que quede desplumado.
Cupido motorizado
Cuenta la leyenda que si uno tiene relaciones dentro de un coche, el vehículo se sala. Probablemente esta superstición la inventó algún quisquilloso obsesionado con la limpieza y el orden para ahuyentar a los curiosos que querían evitar la renta de un cuarto de motel. Claro, en estos tiempos cualquier terreno sirve de trinchera.
¿Pones a San Antonio de cabeza? Bitch, please
Si no te ha servido poner a San Antonio de cabeza, a pesar de que le has rezado sus novenas religiosamente y le has suplicado que te conceda el amor eterno e inolvidable, es porque lo has hecho todo mal. O sea, no le quitamos el mérito a este venerado santo, pero podemos meterle velocidad si brindamos con el sexo opuesto (o con el mismo sexo, eso depende de la orientación de cada quien) la primer bebida de la noche. No necesita ser alguien a quien le traigas ganas, simplemente debes pensar que encontrarás a tu media naranja pronto.
¡A la esquina, no!
Lo mismo. Si no has conseguido pareja en mucho tiempo, lo mejor es que evites sentarte en una esquina. Ese ángulo podría ser el causante de tus frías noches de soledad, así que mejor deja que tu tía Rita se siente ahí, total, ya tiene doctorado en soltería…
Las de Año Nuevo
Uy, aquí las supersticiones se cotizan. Para la noche del 31 de diciembre, uno debe realizar toda clase de artilugios para amarrar una buena vida sexual durante el siguiente año. Ya sea usar un calzón rojo; atar tu foto y la de tu quiubolesqué con un listón rojo para dormir sobre ellas, o bien, poner tu anillo en la copa donde vas a brindar para que tu relación de pareja sea estable y feliz. Más vale prevenir, que lamentar.
Ponerse arriba como método anticonceptivo
Además ser absurda, esta superstición podría dejarlos con un encarguito que tarde nueve meses en llegar. Según la leyenda, las mujeres que se coloquen arriba en el momento preciso del cadereo, no concebirán. Sepa Dios si creen que los efectos de la gravedad serán sus aliados para evitar un embarazo no deseado, pero lo cierto es que si creen en esto, luego no se pongan a llorar cuando salgan con su domingo siete.