El quebradero de cabeza comienza cuando un hombre hace malabares para prendernos. Por lo general comienzan a hacer todo lo que a ellos les gusta, pues creen que también nos gustará, pero sólo terminamos diciendo: ¿qué chin… está intentando hacer?
Por tal motivo, investigadores de diferentes organismos e instituciones educativas se dieron a la tarea de analizar qué cosas nos hacen decir: ¡amorcito, bombón, ven a brincar en mi colchón!
Aquí se las compartimos:
1. Que defiendan nuestro santo descanso
Una investigación realizada por la Universidad de Michigan, y publicada en la Journal of Sexual Medicine, reveló que las mujeres que dormían una hora más de lo habitual incrementaban su calentura al día siguiente en un 14 por ciento.
El estudio se realizó entre 171 mujeres durante 14 días y el promedio de tiempo en el que dormían fue de siete horas y 22 minutos. Pero, ¿por qué se despertaban jariosas? Esto tiene una explicación científica: el deseo sexual desciende cuando las mujeres nos sentimos agotadas. Vamos, ni siquiera queremos levantar la pierna para hacer movimiento alguno. Por el contrario, un buen sueño reparador hace que nos sintamos con más energía y que el deseo sexual se avispe.
Así que, recuérdenlo: el momento en el que Juan Pestañas pasa es sagrado, pero que alguien más lo promueva es sublime. No nos entretengan en la noche y en la mañana hablamos…
2. Que nos hagan un buen masaje
En ocasiones, algunas mujeres interiorizamos nuestros sentimientos. Ya sea que esto suceda cuando nos sentimos enojadas, cansadas o tristes. Pero que alguien llegue con toda la disposición a escucharnos y, de paso, a darnos un masajito, hará que muy probablemente se nos prenda el bóiler.
Un estudio realizado en el Centro Médico de San Diego de la Universidad de California demostró que 15 minutitos de masaje en la espalda incrementan la oxitocina, la hormona que facilita los vínculos emocionales. Una vez que esto termine, lo más seguro es que los volteemos a ver con dos corazones en los ojos y que comience el cadereo.
3. Ver una película romántica
Según un estudio hecho en la Universidad de Maastricht, en Holanda, las mujeres que ven películas románticas como Titanic o The Notebook, terminan con ganas de tener sexo. Y todos se preguntarán: ¿poooor? Bueno, pues resulta que a muchas mujeres les prende la fantasía de esas escenas románticas. Como si situaran en ellas y fueran las protagonistas de esas historias. Aw.
4. Hacer ejercicio en pareja
El ejercicio activa el sistema nervioso simpático y esto hace que nuestro cuerpo se prepare para tener una respuesta sexual más inmediata, según las conclusiones de Cindy M. Meston, Ph.D. y David M. Buss, Ph.D., autores del libro ¿Por qué las mujeres tienen sexo?.
Además, ver sus cuerpos sudorosos, sentir el pulso acelerado y la respiración agitada nos pone en un mood más cachondo al engañar al cerebro y decirle que el otro luce igual que cuando está teniendo sexo. Grrr…
5. Que se enfoquen en nuestro placer
O sea, que no sean egoístas. Según investigadores del Instituto de Kinsey, es mucho más fácil que las mujeres se prendan si sus parejas les dedican, por lo menos, 15 minutos de jugueteo previo.
Pero, ojo, también hacer cosas divertidas fuera de la cama nos motiva a querer tener sexo.
Según un estudio publicado en la Journal of Sex and Marital Therapy, ir a un show de comedia o hacer yoga permite que los músculos de sus abdominales se ejerciten y estimulen el nervio vago que corre a través de la pelvis. En resumidas cuentas, esto hace que los orgasmos fluyan como peces en el agua.
6. Que nos subamos a una montaña rusa
Probablemente muchas se pongan al brinco en este punto, pero tiene su razón científica. El Meston Lab, laboratorio de psicología sexual de la Universidad de Texas, descubrió que subirse a una montaña rusa incrementa el deseo sexual de las mujeres.
Una vez que se bajan de estos juegos ven mucho más atractivas a sus parejas que las acompañaron en este aventurado viaje. ¿Por qué? La atracción se incrementa debido a que el sistema nervioso simpático se activa después de las subidas y bajadas producidas en la montaña rusa. Como consecuencia podríamos besarlos y querer llevarlos al hotel más cercano.
7. Que nos muestren sus habilidades
El Instituto Kinsey realizó una investigación mediante la cual demostró que las mujeres sienten mayor deseo sexual por los hombres que se muestran talentosos. Por ejemplo, que hayas obtenido un premio por algún trabajo tuyo o que sepas cantar o bailar muy bien.
Por el contrario, lo que las tira es que sean sucios y desorganizados. Ahí sí no hay vuelta de hoja. Mejor huyan y vayan a darse un baño vaquero, por lo menos.
¿Qué les parece? ¿Están de acuerdo con estas investigaciones o creen que erraron?
También lee:
Aquí las fechas para la Expo Sexo y Erotismo 2017
Palacio Nacional se iluminará permanentemente a partir de 2017
El Metro prueba un sistema de piloto automático hecho en México