… lo cual, se traduce como dar mi opinión/punto de vista de algo a alguien, sin ser requerida.
Este es el punto importante. ¿Cuántas veces le has dado tu opinión/consejo/ayuda a alguien que NO TE LO PIDIÓ? Seguramente más de una, sobre todo si eres terapeuta -como yo-. Y es que, no importa lo bueno/iluminador/maravilloso/enriquecedor que pueda ser tu punto de vista para el otro, sino te lo pidió, es una falta de respeto. Es ponerte por encima de la otra persona, porque el mensaje es: yo sé lo que necesitas; por lo tanto sé más YO de TI, que TÚ de TI MISMO(A). ¿Me voy explicando hasta aquí?
Pondré un ejemplo: un amigo cercano nos está platicando que tiene un problema…
Amigo: "amiga, me siento súper mal porque mi novia me cortó, pero me sigue buscando, aunque ya no quiere ser mi novia… pero es que yo la amo, no puedo vivir sin ella, así que tendré que aceptar esta situación. Espero que se le pase pronto esta etapa y volvamos a lo que teníamos antes".
Seguramente, para muchos de nosotros, nuestro primer impulso sería decirle todo lo que vemos y "solucionarle" el enredo que trae. Pero, ¿en algún momento leyeron… tú qué opinas ó ayúdame ó cómo la ves? … NO, sólo quería ser escuchado, él ya sabe lo que va a hacer, en este caso sólo se quería desahogar. ¿Si lo pueden ver? Por lo tanto, lo respetuoso y amoroso, es sólo escuchar a nuestro amigo y acompañarlo en su proceso.
Y, no lo vean sólo cuando ustedes han hecho alguna intervención fuera de lugar…has memoria, seguramente en alguna ocasión a ti también te han dado un consejo -con la mejor de las intenciones- de algo que no pediste. Acuérdate ¿cómo te sentiste?
El chiste está en que la persona te pida la ayuda/consejo/punto de vista.
Con esto, no quiero decir que no se vale ayudar al prójimo… ¡claro que se vale! El chiste está en que la persona te pida la ayuda/consejo/punto de vista. Además, hacer esto, también es una forma de hacernos responsables de nosotros mismos y de nuestras acciones… sino, es muy fácil echarle la culpa al otro, como por ejemplo. "claro, si no te hubiera hecho caso, ella seguiría conmigo; además… yo ni siquiera te pedí tu opinión… pero eso me pasa por escucharte". ¿Les suena familiar? Seguramente más de uno, hemos estado en una situación parecida.
Dicho todo lo anterior, cuando quieras intervenir/aconsejar/ayudar al otro…respira y revisa si te lo pidióo te estás yendo en automático nuevamente. Si de plano, es mucha tu necesidad de decírselo, pregúntale primero si le puedes dar tu punto de vista al respecto. Si te dice que sí, adelante…pero si te dice que no, quédate con eso y sólo escúchalo, acompáñalo en su proceso.
Intenta hacer esto, sé que no es tan fácil como se lee, pero trata ponerlo en práctica y me dices qué tal te va.