¿Por qué entraría en nuestro calendario?
Cuerpazo, ojasos. La hemos visto con atención, enamorándolos a todos, niñas bien, niñas mal, carrera fugaz al estrellato. María de todos nuestros corazones. Grrr. Nada más verla, cual serpiente, amarrada de los brazos de José María de Tavira en alguna publicación reciente. Como Dios la trajo al mundo.
¿Cuáles son sus problemitas?
Pues… Quizá la infinita delgadez de sus brazos y cuerpos juegue en su contra. Pero cada loco con su tema.