Éste es el juego del calentamiento del sexo

Antes de subirte al guayabo, diviértete

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Lupita te manda un mensaje por la noche: hoy toca. Aleteas tus brazos en señal de empoderamiento y gritas: ya chingué. Tus horas Godínez parecen interminables y no ves el momento en que el reloj marque las 6 de la tarde para huir directito a ver a Lupis, quien a su vez ya se lanzó rauda y veloz a su casa.

La cosa se pone peliaguda al momento de darle, pues Lupita te pidió que le metieran creatividad, ya que llevan un buen tiempo aplicando la misma rutina de cadereos: oral, misionero y perrito; oral, misionero y perrito; oral, misionero, perrito… y así todas las semanas.

Pues cómo no, ya hueva.

Y lo peor de todo, lanzarse a una sex shop por algunos juguetes, no es opción. Andas más pobre que ratón de iglesia, así que invertir en algo es imposible.

Bueno, pues además de seguir las proezas que les hemos pasado al costo anteriormente, ahora podrán divertirse antes de darle duro y tupido.

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Verdad o reto

Todo un clásico. 

¿Qué se requiere? Hojas de papel.

¿Cómo se juega? Seguro lo jugaron de chavitos: consiste en soltar preguntas que verdaderamente quieran saber del otro. No se vale rajarse ni recriminar después. Aguanten a lo machín. O bien, si de plano no quieren contestar, entonces acepten el reto que les imponga su pareja. Para que sea más divertido, anoten en diferentes papeles retos que les gustaría que hicieran con ustedes: sexo oral durante X tiempo, probar alguna posición, sesión de besos.

La piñata

Como buen momento de darle a la piñata, uno se venda los ojos y el otro le da.

¿Qué se requiere? Una mascada, hielos, lubricante de sabor.

¿Cómo se juega? El que se venda los ojos permanece estático, el otro recorre su cuerpo y le da besos estratégicos antes de comenzar a darle. El secreto consiste en que quien no tiene vendados los ojos, mantenga a su pareja en suspenso al describirle el lugar en el que irá el siguiente beso. Pueden aplicar un poco de lubricante de sabor en los puntos que elijan dónde posicionarán el siguiente beso o bien, comer un hielo para intensificar las sensaciones.

Hotline

¿Qué se requiere? Un teléfono.

¿Cómo se juega? El jugueteo puede iniciarse desde que estén lejos uno del otro. Ya sea con una sesión de sexting (para los puritanos: no se alboroten, es entre dos adultos que de forma consensuada lo realizan) o una llamada en la cual describan detalladamente qué se harán el uno al otro al encontrarse. La clave está en seguir al pie de la letra todo lo que hayan descrito.

El Rey dice…

¿Qué se requiere? Una baraja inglesa de cartas.

¿Cómo se juega? Cada una de las cartas representa una acción. Corazones significa besos, tréboles significa sexo oral, diamantes significa beso negro, picas significa masturbación a la pareja y los números serán los segundos durante los cuales se efectuará cada una de las acciones. Rey significa que él dirá qué es lo que quiere que se le haga, Reina significa masaje, Joto significará el 69 y As significa que escogerá un lugar diferente a la cama para hacerlo.

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Un pasito pa’delante y un pasito para atrás

¿Qué se requiere? Nada.

¿Cómo se juega? Uno de los dos tiene que estar sobre la cama sin ropa. El otro se ubica afuera del cuarto (o si están en un motel, lejos de la cama). El que está recostado va haciendo preguntas como por ejemplo: ¿cuál es la posición que quiero experimentar? Si contesta bien, el que está de pie se quita una prenda y se acerca al lugar de los hechos. Si contesta mal, deberá ir un paso para atrás. El punto es que sean preguntas difíciles, no vayan a soltar las típicas que ya saben la respuesta, pues el juego se tornará bastante aburrido.

El chiste es que le metan algo de variedad al asunto antes de lanzarse al precipicio. Que la cosa esté más divertida siempre hará que todo sea más flojito y cooperador.