Por más que lo intentan debajo de las sábanas, de plano, la cosa no jala. Ya probaron todas las posiciones, han leído minuciosamente todos nuestros consejos, se han metido a páginas para copiar ideas, bueno, hasta han visitado lugares para fomentar la creatividad y niguas, nada funciona.
Muchas personas creen que la compatibilidad sexual es algo que pasa a segundo plano cuando el amor impera (¡aaasumecha!). Y bueno, tampoco es que nos opongamos a eso (no estamos tan amargados… aún), pero hay que aceptarlo: si físicamente no encajan, dentro de nosotros se dispara una sirena que difícilmente podemos apagar.
Por eso, nos dimos a la tarea a entrevistar al sexólogo y psicoterapeuta sexual Arturo Vera Martínez para que nos diera algunos consejitos para comprender esta situación y poner los puntos sobre las íes:
Mucha gente se casa con alguien sin conocerlo en el plano sexual, ¿qué pasa si descubren que son incompatibles?
Éste puede ser un gran error, aunque no siempre lo es. Hoy en día, aún hay una inmensa cantidad de parejas que piensan que lo ideal es esperar a la noche de bodas para tener la primera relación sexual. Esto generalmente responde a los valores o creencias religiosas que la gente tiene. Piensan que eso pasa a segundo plano y se descubrirá durante la noche de bodas o (incluso) después y que seguramente se “arreglará” como si fuera algo mecánico. En la mayoría de los casos tiene solucion, aunque esto no siempre es así, si no hay compatibilidad, o no sienten deseo el uno por el otro, seguramente no tendrán una buena vida sexual.
¿Puede ser que con el tiempo se genere cierta incompatibilidad?
Sí, cuando deja de existir el deseo, es decir, que se pierda la atracción fisica, sexual y erótica por el otro. En ocasiones llegan a terapia personas que quieren que se les “devuelva el deseo” por sus parejas y esto no sucede así. El deseo significa tener ganas y ello se traduce en querer sentir, oler, tocar y hablar con una persona. El deseo no se da por arte de magia. Hay personas por las que uno puede sentir atracción sexual y otras por las que no. Si la pareja se desea es muy probale que pueda haber compatibilidad. Ahora bien, si sólo se quieren y se llevan bien, pero no se desean, ni hay excitación, podría no generarse esta compatibilidad.
“Si no hay compatibilidad, o no sienten deseo el uno por el otro, seguramente no tendrán una buena vida sexual”.
¿Qué se puede hacer en ambos casos?
Hay una serie de ejercicios que sirven para erotizar el cuerpo e incluso el de la pareja. Es importante que nos demos cuenta si verdaderamente existe un deseo sexual por el otro o si sólo vemos en ella a una muy buena persona que nos ayuda a conseguir las metas que tenemos en otros aspectos. Un buen ejercicio es preguntarse con honestidad: ¿qué me erotiza, atrae o calienta de mi pareja? y después platicarlo. Hay ocasiones que esto también se pierde con la cotidianidad de la relación, los horarios de cada uno, las actividades, el cansancio, etc. Así que es tarea de ambos prender la llama.
¿Qué pasa si se intenta de todo y nada resulta?
Hay dos caminos, uno de ellos es un poco polémico. Si de plano la pareja cree que no hay compatibilidad en la parte erótica, lo “más facil” (y se entrecomilla porque es muy dificil tomar una decisión así) es separarse y acordar quedar como muy buenos amigos, pero no como amantes o como pareja sexual. La magia en una pareja es hacer que el deseo no se apague, cuestión que se convierte en una tarea diaria para evitar dejarse llevar por una rutina monótona y aburrida. El otro camino consiste en que ambos tomen la decisión de satisfacer la parte sexual con alguien más. Esto no es un planteamiento nuevo, ya que este tipo de prácticas se iniciaron en la década de los 70 con las parejas abiertas y ahora con el poliamor (que son dos cosas diferentes). Para que alguna de estas situaciones se dé, es necesario que las parejas tengan un planteamiento muy claro y seguro de que la relacion amorosa/afectiva no se va a ver trastocada por que alguno de los miembros o los dos satisfaga la parte erótica con alguien más.
“Es importante que nos demos cuenta si verdaderamente existe un deseo sexual por el otro o si sólo vemos en ella a una muy buena persona.”
¿La incompatibilidad está ligada a la atracción física?
Sí y no. Puede haber atracción física, se puede percibir a la otra persona como la más atractiva, pero no necesariamente habría deseo sexual. Hay parejas que ven a su cónyuge como el más guapo o la más hermosa, pero no hay deseo, no se excitan con ella. Sin embargo, es muy común que si alguien nos atrae, se le desee y se tengan ganas de tener relaciones sexuales con aquella persona; en caso de que esto suceda, llevamos más de la mitad de la carrera ganada, puesto que la atracción fisica y la sexual estarían ligadas y esto es muy importante en una relación de pareja.
Si desean mayores informes sobre el tema, aquí les pasamos al costo el correo del maestro Vera: [email protected] y su Twitter: @jonitz, para que mitiguen todas sus dudas.