Hace algunos ayeres nos enteramos que a Ricky —AKA guapote, papacito— Martin le gustaba la lluvia dorada. Muchos se escaldaron y les hizo ruido que al puertorriqueño le gustara que le echaran esa agüita amarilla que a muchos les causa repele.
En realidad, a varios les parece una práctica un tanto extraña. Compartir en pareja algo que nos limitamos a hacer en la privacidad de un baño para prender la mecha de la pasión —por irónico que suene—, podría sonar algo fuera de lo común.
Pero no lo es y aquí les platicamos más al respecto.
Para los principiantes
Nos contactó una lectora —que pidió guardar el anonimato— y nos platicó sobre su experiencia.
Su pareja le pidió hace algún tiempo orinarle encima, lo cual le hizo un poco de ruido al principio. Sin embargo, conforme pasó el tiempo, dejó que sucediera: él lo hizo por completo, de pies a cabeza.
Nos contó que esta sensación cambió su perspectiva sobre esta práctica, también conocida como Urolagnia. Conforme más la repetían, más se enganchaba con ella. Y por lo que nos dijo, ahora lo disfruta mucho.
Esto es una forma más de vivir la sexualidad, lejos de comer siempre pan con lo mismo.
Hay para todos
Platicamos con Kristal de Sade, administradora de Calabozo MX, y nos dijo que dentro del BDSM es considerada una práctica que se utiliza para diferentes situaciones, ya sea como humillación, como marcaje —en donde los amos marcan a sus sumisas—, o bien, como un premio que reciben de sus propios amos.
De igual forma, nos lanzamos raudos y presurosos para preguntarle a la sexóloga Ka —a quien pueden encontrar como Sexoconka en Facebook y Twitter— y nos dijo cómo es que la gente practica la urolagnia y cómo la perciben.
En la sexología forma parte de las expresiones de comportamiento de la sexualidad; es decir, de las parafilias. Y existen siete diferentes niveles. Los primeros dos no tienen ningún interés erótico por la urolagnia, pero sienten placer por orinar. Es decir: ya sea que se aguanten mucho para ir al baño y sientan alivio al ir, o bien, que orinar sea una práctica relajante y satisfactoria para ellos, tanto que instalan televisiones en sus baños, revisteros o computadoras.
Los otros cinco niveles sí son eróticos. El primero es la fantasía, o sea que SUEÑAN con que los orinen o con orinar encima de otras personas.
La siguiente expresión erótico sexual mínima consiste en haberla practicado sólo una vez en la vida y haberla disfrutado. Por ejemplo, que alguna vez se hayan bañado con su pareja y que por error los hayan orinado encima. La experiencia les resultó agradable y no le harían el fuchi en otra ocasión.
El resto se trata de las expresiones erótico sexuales conocidas como: preferida, predominante y exclusiva. En la preferida es cuando les gusta que les orinen u orinar encima de sus parejas en algunas ocasiones. En la predominante es cuando de 10 relaciones sexuales que tengan, ocho incluyen esta práctica. Y la exclusiva es cuando sólo se prenden y tienen sexo cuando incluye la lluvia dorada.
¿Cuáles son las opciones con las que la gente se prende con la orina?
Bueno, pues existen varias alternativas:
El pussing: donde una persona observa a su pareja mientras orina en un lugar público sin que nadie se percate de ello. Por ejemplo, que entre al baño de la fonda de doña Chonita y que vea cómo orina el otro.
Te veo y me ves: donde a una persona le gusta ver que alguien más orine o ser visto durante esta difícil misión.
Ese aroma…: hay gente a la que le excita el aroma de la orina.
Ups… me ganó: algunas personas se encienden cuando ven que alguien se moja con orina.
Para amenizar el momento, los dejamos con esta célebre canción de Los Toreros Muertos:
¿Ustedes han probado esta práctica? Si no, ¿le entran o les da miedo?
