En el censo de 2020, la Ciudad de México confirmó lo que ya se sospechaba, la soltería urbana llegó para quedarse, ya no es una moda, ni tendencia, ni estilo de vida, es algo más subversivo: lxs unipersonales conforman un hecho con impacto social, demográfico, político, cultural y económico; y algunxs especialistas dicen más: es una opción de vida. De la población total en la Ciudad de México, 38.1% son solteras y solteros; y en el resto del país, solo en el estatus de solterxs, sin incluir a divorciadxs, separadxs y viudxs, es de 34.2%. El crecimiento sí es escandaloso.