CERRADO TEMPORALMENTE Orquídeas Café Bistrot

Av. México 117

Entre Iztaccíhuatl y Chilpancingo

Col. Condesa

Tel. 5574 7464

Horarios:
mar-dom 8-23 h
Precios: $ 150 - $ 250
Formas de Pago:
TC: Todas
Efectivo
Sitio Web
Generos : Italiana
Servicios: Desayunos, Abierto en Domingo, Musica en vivo, Cena después de las 23 horas, Ideal para grupos grandes, Valet parking, Servicio de bar, Internet Inalámbrico, Ambiente familiar, Para precopear, Girlie, Para socializar

No es un lugar más de la condechi, en donde los meseros se codean contigo como si fueras su colega y nada más se pasean, presumiendo el cuerpo y los tatuajes en la espalda baja. La gente aquí respeta el espacio de cada persona. Los que atienden te tratan con delicadeza, el hilo conductor entre naturaleza y comodidad, justo como se debe tratar a una orquídea.

Para disfrutar de este sitio, lo más recomendable es tomarte la mañana libre para ir a pasarla ahí sin prisas. Es recomendable que desayunes en las mesitas para después, si no hay mucha gente, terminar el café y el postre en los sillones que tienen vista al parque.

Pide un jugo de naranja para beber mientras analizas la carta. La especialidad es el Desayuno Venusta (flor nativa de Nepal e India cuyo nombre significa “piel de víbora”), que en términos más simples es un omelette de claras de huevo, tiernitas en la superficie pero con un ligero crunch en el interior. Dentro lleva una considerable ración de queso parmesano finamente laminado, de manera que no llega a opacar el discreto sabor de las claras, que fueron preparadas con muy poco aceite y se humectan con la grasa natural del queso. De guarnición lleva espárragos verdes al vapor que puedes comer intercalando bocados con el omelette para refrescar y neutralizar el paladar.

Para terminar, la carta cuenta con una amplia gama de tés e infusiones. También, si lo prefieres, puedes pedir un espeso exprés cortado para quedarte a leer el periódico, checar tus mails o, simplemente, ver a la gente pasar.

Aunque recomiendan mucho sus panes pita rellenos, no los pidas; apenas tienen una embarrada de jocoque y de la carne con la que los hayas pedido. Hasta el aire tiene más sabor que éstos.

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