La “democratización” de los sonidos logró que la música se dejara de etiquetar y considerar que debía ser distinta dependiendo la estratificación social. El fenómeno claro sucedió por ejemplo con Los Ángeles Azules; la alineación de Iztapalapa al convocar a ídolos pop como Ximena Sariñana o Moderatto alcanzó a otra audiencia.
De Latinoamérica para el mundo
A los integrantes de la banda Sonido Gallo Negro les pasó algo similar; al acercarse al género de cumbia salvaje decidieron fusionarla con su propuesta sonora original, el underground rock. En los acordes de una buena rola, que deja sacarle brillo a la pista, la agrupación encontró su camino musical ideal.
“Nuestro acercamiento a la cumbia fue justamente para buscar y salirnos de una cierta estructura de comercialización del rock que nos parecía aburridísima. La cumbia es muy noble, siempre que haya una buena propuesta le puedes aportar cosas experimentales con pop o de raíz cultural”, dijo Gabriel López, guitarrista.
En entrevista con Chilango, uno de los fundadores de Sonido Gallo Negro consideró que la música debe ser “un estandarte social que no tiene fronteras. Sirve para entrar en contacto con los paisanos ahora que estamos de gira por Estados Unidos. Que los mismos residentes conozcan la cumbia es otra forma de aceptarnos”.
Para López la cumbia salvaje, con sus guitarras, órganos excéntricos, sintetizadores análogos, theremín y que retoma las raíces de la música tropical psicodélica, “mundialmente percibo que hay una aceptación bastante fuerte. Esta es una gran oportunidad para exportar la calidad de nuestra cultura y las cosas musicales”.
Gabriel consideró que “son tiempos muy chidos para la escena latina, no nada más en cumbia, sino culturalmente. Espero que la raíz latina tenga un reconocimiento internacional y una revalorización de toda su cultura, gastronomía y música, es un gran tiempo para lograrlo”.
CDMX… un epicentro musical
La capirucha está que arde, no solo por el calor, sino porque más que nunca es el centro de una vida cultural que abraza también eventos de talla internacional, con famosos de Hollywood visitando museos como la casa de Frida Kahlo cada semana, pero en particular la música tiene un escenario inmenso.
López analizó la importancia que tiene CDMX para que los sonideros y la cumbia salvaje, que él hace al lado de Enrique Casasola, Israel Martínez (bajo), Lucio de los Santos (flauta), Dr. Alderete (theremín y arte) y Darío Maldonado Cardeño (guitarra), siga creciendo.
“Cuando empezó la banda tratamos de reflejar iconos de CDMX como el Mercado de Sonora, La Lagunilla (…) La canción ‘Bocanegra’, que es de las más populares de nosotros, cita a esa calle donde está el Mercado de Antigüedades. Ya se venía notando la tendencia a revistar y ver de diferente manera lugares cotidianos.
“La Ciudad de México es ahora mismo un hervidero de propuestas musicales y culturales, solo falta detenerse un poco para volverlas a ver. Ahora mucha gente ya se ha dado cuenta… ya hay más compradores de vinilo, gente en Mercados de Pulgas y la gentrificación. Va por etapas y sigue la periferia”, anotó Gabriel.
La gentrificación y la cumbia
Lo mexicano está de moda en el mundo, pero más aún venirse a vivir a CDMX y no solo en los barrios más comunes como la Condesa o la Roma, ahora también se están construyendo edificios de departamentos que cuestan más de $3 millones, en sitios que no se habrían pensado antes, como en la Peralvillo.
La gentrificación también ha hecho eco en la música, como lo analizó López. A corto plazo sabe que hay, como en todo en la vida, pros y contra de esta mezcla cultural para la cumbia, pero a la larga, ve una luz en el túnel, así que no está tan preocupado.
“Para el desarrollo del mercado es bueno. La CDMX siempre ha sido un lugar que tiene vida propia, desde la Conquista este territorio ha sido amable, pero al mismo tiempo rudo. El ciclo natural se encargará de ser una especie de sacudidor para ver quién se queda y quién se va, eso también se va a reflejar en la cumbia”, detalló.
Gabriel comentó que en este momento la gentrificación “tiene sus ventajas y desventajas, pero, a largo plazo, que es lo más importante para la tradición musical cumbiera, hay otros factores. Estamos en una locura, la CDMX es un epicentro y casi es un Blade Runner, solo hace falta verla con esos ojos”.
Un show que promete
A punto de embarcarse en una gira por más de 30 fechas en EE.UU. y Europa, Sonido Gallo Negro ofrecerá un bailongo bajo la temática Infierno Musical en chilangolandia en el Salón La Maraka, el 18 de junio, en el que compartirán escenario con Frente Cumbiero. Estarán por primera vez juntos.
“Estaremos estrenando nuevas canciones. Vernos a las dos bandas en un solo show siempre es bueno porque la energía no se disipa, en este momento se juntan las propuestas con la de Mariposas del Alma que viene de San Francisco y su cumbia es soul chicano. Es un cártel bastante chido”, adelantó López.
De La Maraka, Gabriel finalizó que tiene un mood igual al que se logra en el California Dancing Club, Salón Los Ángeles o el Cabaret Barba Azul. “Es un salón icónico, le da un plus de que no es un lugar al que nuestro público esté habituado, le da una magia y una energía que no hay en un antro”.