The Horrors son una banda que se dieron a conocer por su obscura imagen, casi gótica, que inspiró a miles de fans alrededor del mundo. Ayer en el concierto del grupo en el José Cuervo Salón quedó claro que ya no había rastros de eso. Los peinados exagerados y la vestimenta a la Tim Burton ya no estaban presentes, parecía que ahora la banda estaba solamente preocupada por una cosa: La música. Tan es así que durante una buena parte del concierto era casi imposible verles la cara o algún rasgo de su vestimenta.
Más bien eran siluetas que no se podían distinguir claramente por culpa del humo y las diferentes luces de todo tipo de colores que invadían el recinto. La combinación creaba imágenes tan vívidas y coloridas como la portada de Skying, algo muy contrastante con los inicios de la banda.
Unos minutos después de las once The Horrors subieron al escenario y comenzaron con “Changing the Rain” de su último LP. De ahí en adelante intercalaron temas de Skying con otros de Primary Colours, ganándose a la audiencia en el proceso. La interacción entre el grupo era mínima pero cada que podía Faris Badwan (que tenía una bandera de México colgada en el soporte de su micrófono), se encargaba de agradecer al público por su enérgica respuesta.
El combo de “Dive In”, Three Decades” y “Endless Blue” fue uno de los mejores momentos de la noche y donde se podría decir que el concierto despegó. Aquí los asistentes comenzaron a saltar y a aplaudir al ritmo de las canciones mientras que la banda se movía desenfrenadamente sobre el escenario, especialmente Joshua Hayward (guitarrista) y Badwan.
Conforme avanzaba la noche el concierto subía de ritmo, el grupo cada vez se dejaba llevar más por la música y el público respondía entusiasmado al ver a una banda completamente entregada. El punto cumbre llegó cuando interpretaron “Sea Within a Sea”, se notaba que era la más esperada por la mayor parte de la audiencia que coreó cada palabra con toda la fuerza que tenía. Algo tremendamente importante para cualquier músico es la evolución, no sólo con su nuevo material sino también con sus grabaciones pasadas.
Ese fue el caso esta última canción, que claramente ha evolucionado mucho desde su versión de estudio, ahora sonó masiva, como si el sonido se estuviera desbordando y el José Cuervo no pudiera contenerlo. Solos de guitarra y bajo por aquí y allá, experimentación con el característico sintetizador de la canción y una batería mucho más poderosa fueron los pequeños cambios que se le hicieron al tema pero que resultaron muy eficientes para crear algo de proporciones épicas.
Después de ese gran momento siguió “Still Life”, la cual también causó una buena reacción en la audiencia, muchos aplausos y gritos, en gran parte gracias a la euforia que había creado “Sea Within a Sea”. De pronto terminó el primer sencillo de Skying y el grupo se despidió. Varios asistentes se veían y preguntaban si eso era todo, y con toda razón porque apenas era la media noche y el grupo había salido después de las once.
Pasaron unos minutos, que se sintió un poco prolongado, para que The Horrors regresaran al escenario y cuando lo hicieron inmediatamente interpretaron “Mirror’s Image” recibiendo una fuerte ovación del público. Siguieron con “Moving Further Away”, la cancion más larga del Skying. Aquí la banda aprovechó la extensión para hacer un poco de improvisación y usar instrumentos de percusión como panderos y maracas.
En los momentos donde no cantaba, Badwan usaba el feedback entre su micrófono y las bocinas para crear su propio “instrumento” y unirse al jammeo con el resto de la banda. El público había bajado de ritmo, les gustaba lo que veían pero no tanto como la primera parte del show. Después de poco más de nueve minutos de “Moving Further Away” el grupo agradeció y se despidieron.
La audiencia gritaba que tocaran otra con bastante intensidad y por un momento parecía que sí iba a suceder pero pronto prendieron las luces y dejaron claro que la velada con The Horrors había terminado. Al final se escuchaban muchos comentarios que se quejaban de que no habían tocado nada del primer disco y de la corta duración. Con tres discos de estudio bajo el brazo The Horrors ya podrían estar tocando por lo menos hora y media.
El otro gran problema fue que el encore bajó los ánimos que se habían gestado a lo largo de la noche, fue un poco anticlimático y eso fue lo que probablemente dejó a la gente con ganas de más. The Horrors sonaron mejor que nunca, el sonido fue prácticamente impecable, están muy conectados con la música que están haciendo, es una banda que ha madurado y evolucionado con cada disco, si siguen por este camino pronto serán una de las bandas más importantes de su país.
Fue un gran concierto, que desafortunadamente lo que tuvo de bueno lo tuvo de corto.
Setlist:
Changing the Rain
Who Can Say
I Can See Through You
Scarlet Fields
Dive In
Three Decades
Endless Blue
You Said
Sea Within a Sea
Still Life
Encore:
Mirror’s Image
Moving Further Away