El cantante de Passenger, autor del éxito mundial “Let Her Go”, conversó en exclusiva con Chilango sobre su nuevo álbum que en el que colabora Ed Sheran.
Hace diez años, el cantautor británico Mike Rosenberg, conocido como Passenger, lanzó All The Little Lights, álbum que incluye el éxito mundial “Let Her Go“. Conversamos con él sobre las lecciones que le deja el aniversario del disco.
Disfruta de más entrevistas exclusivas: Suscríbete al newsletter de Chilango
¿Cuál fue el punto de quiebre que hizo que escribieras Life ‘s For The Living?
El viajar y tocar mi música en las calles me permitió entender la gratitud, eres testigo de tantas cosas allá afuera que maduras más rápido y ves la vida de otra forma. Es difícil entender todo el tiempo lo afortunado que eres, pero es un ejercicio diario por hacer.
Regrabar el tema con Foy Vance 10 años después, siento que es como leer El Principito otra vez. Siempre te resuena de una manera distinta.
Soy una persona completamente diferente a la que escribió el tema. Y es por eso que quise regrabar el álbum. Aún estoy de acuerdo con la letra de esa canción, pese a mis canas. La vida es un caos, pero debes aceptarla, vivirla, disfrutarla y no quedar atrapado en los detalles.
Eres Tauro como yo, y nos cuesta soltar. ¿Qué tanto lo pones en práctica como lo haces en la letra de Let Her Go?
Todos tenemos que hacerlo en algún momento de nuestras vidas, ya sea por una ruptura o si alguien muere. Cuando la escribí estaba terminando con una novia, y me sucedió lo que a todos: no sabes lo que tienes hasta que lo pierdes, cuando estás con alguien por un tiempo olvidas lo que es la vida sin esa persona. Fue una gran lección para mí, pero fue muy doloroso en su momento.
También te puede interesar: Entrevistamos a James Wan sobre Aquaman y el Reino Perdido
¿Cómo manejas el dejar ir?
Cuando lo has hecho un par de veces, es más fácil (risas). Sabes que dolerá un poco, pero después de un tiempo estarás bien. Vas a empezar un nuevo capítulo de tu vida y será grandioso. Y sí, el tiempo puede ser hostil, pero lo supe desde que era joven.
Escribir una canción te coloca en una vulnerabilidad tremenda frente a otros. ¿Qué tema de este nuevo álbum te costó re grabar y por qué?
Hay canciones que han madurado bastante bien después de 10 años de grabarlas, pero sí, ya no me siento cómodo con The Wrong Direction, aunque sé que a muchos fans les gusta. Es como leer un diario de cuando tenías 16, hay emociones que ya no encajan.
Hay una parte de la letra de esa canción que dice: “me escondo detrás de mis chistes como una forma de protección”. ¿Lo sigues haciendo?
Esta entrevista parece una sesión con mi terapeuta, me encanta (risas). Sí, aún lo hago, es parte de mi personalidad y un mecanismo de defensa. Creo que la gente graciosa lo aprende a ser para protegerse a ellos mismos. Crecer en Inglaterra también tiene mucho que ver, aquí debes ser gracioso, no hay de otra.
Y después de 10 años, ¿aún odias The X Factor y el rostro de Cher?
El rostro de Cher ya no, me arrepiento de esa parte de la canción y en mis shows en vivo la cambio por el de Donald Trump o alguien más. Le ofrezco una disculpa a Cher, fue una broma estúpida. Sobre The X Factor aún pienso que esos programas han hecho la música idiota, y que se aprovechan de los artistas; explotándolos por años.
¿Qué odias ahora?
Justo pensaba en hacer una versión nueva de esa canción. Es una canción con la que mucha gente que no me conoce realmente puede hacerlo con humor. Porque mucha gente puede asumir que soy una persona que llora todo el tiempo por el tipo de canciones que hago. Odio lo dividido que está el mundo en los últimos 5 años y cómo la política se ha convertido en algo muy aterrador.
¿Regresarás a CDMX?
Me encantaría volver, he tocado dos veces en CDMX y me asombra la cantidad de fans que tengo allá. Soy tan amigables, apasionados, tan abiertos culturalmente a diferencia de Inglaterra. Me siento muy cobijado.