La cantautora chilena-mexicana Mon Laferte comenzó una nueva era en su carrera este año: la de Autopoiética. El disco donde se reinventó y que la llevará de gira en 2024. Pero antes habla sobre su concepción, la parte chilanga y más.

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Mon Laferte cierra su 2023 con Autopoiética

Tras siete discos de estudio y consolidarse como una de las voces femeninas más importantes de la música en español, Mon se reinventó. Y, a la vez, en su octavo álbum Autopoiética se mostró más ella.

¿Cómo describiría tu nuevo disco la manera en la que te reinventaste este año?

“Es un álbum muy especial, muy ecléctico. Creo que en este disco viven todos los universos que me interesan, que me emocionan, está lo más clásico, la salsa, el bolero, la música electrónica, la ópera, el dembow, la cumbia. Yo soy muy melómana y no tengo placeres culpables. Toda la música para mí es maravillosa, todo tiene algo, cada música es para algún momento especial. Necesitamos bailar, reflexionar, llorar, y creo que todos esos universos viven en Autopoiética. Tomé la decisión de contar mi historia a través de estos ritmos”.

Y así lo hace en tracks como “Juro que volveré” donde trata sobre migrar de Chile a México, y “Tenochtitlán” con un título muy chilango pero que es más que eso.

Tú siempre traes algo chilango en tus discos, ¿qué hay de estas canciones?

“Sí, bueno es que soy ya muy chilanga. Llevo 16 años ya aquí, entonces pues, digo que somos como una raza especial los chilangos. Esta es una ciudad muy maravillosa, es un país maravilloso, muy surrealista, muy ecléctico, mucho arte y permea en mí México. ‘Tenochtitlán’ es una canción bien especial, el coro estaba en mi cabeza como dando vueltas, como la melodía, y la palabra Tenochtitlán estaba ahí presente”.
Esta y el resto de las que integran el disco Autopoiética, cuenta Mon Laferte, nacieron en el estudio de su casa, “aunque creo que ya estaban en mi corazón”. Lo único que tenía en mente al comenzar a trabajar en este álbum era el concepto de la autopoiesis, que se refiere a la reinvención. El resultado es un material donde se refresca expandiendo su versatilidad en los ritmos ya mencionados, y maneja su voz de los susurros a su máxima potencia.

Sobre vivir, llorar y ser feliz en la CDMX

Has dicho que estás en un momento de gran seguridad como persona y artista, ¿qué tanto te ayudó lo ruda que puede ser la vida en la CDMX?

“Llegué cuando tenía 24 años. Yo sentí que casi no había vivido hasta que llegué a vivir a México. A mí este país me sacudió, me dio un revolcón de amor, de cachetadas, de todo, ¿sabes? Aquí he tenido mis grandes amores, mis grandes pasiones, amistades, decepciones, que es la vida adulta porque llegué muy jovencita. A pesar de que ya había vivido bastante, tenía mi camino porque empecé muy niña a trabajar, a los 13 años ya andaba viajando por mi país con mi guitarra. México es un país muy especial, muy grande también, entonces todo ese camino ha influido en mi manera de crear y hacer música”.

Y, ¿sí lloraste mucho bajo el cielo de Tenochtitlán, como dice tu canción?

“Si he llorado mucho bajo el cielo de Tenochtitlán, pero también he sido muy feliz bajo el cielo de Tenochtitlán. O sea, todo es una metáfora, no necesariamente la canción va de que México me ha tratado mal, para nada. Va de los juicios sociales en general de la sociedad, pero menciono Tenochtitlán porque siento que hubo una etapa mía de mucha fragilidad estando sola aquí. En mi país Chile tenía mi familia, mis amistades de la vida, y llegué a México, mi segundo país, pero aquí no conocía a nadie, estaba completamente sola. Entonces sí es difícil enfrentar situaciones en soledad”.

Bellas Artes y el Auditorio Nacional

Entre los momentos felices de Mon Laferte en la CDMX, está cuando se confirmó su presentación del pasado 9 de diciembre en el Palacio de Bellas Artes.

Esa chavita que llegó siendo veinteañera al entonces Distrito Federal, ¿se imaginó en Bellas Artes o nunca pasó por tu mente?

“Nunca. Para ser muy honesta, sí pensé que iba a llegar a Auditorio Nacional. Pasaba por ahí y decía ‘yo algún día voy a cantar aquí, voy a trabajar para esto’, yo muy segura. Pero Bellas Artes jamás, o sea, no pasaba por mi cabeza. De los artistas que más admiro, Juan Gabriel, Chabela Vargas, ellos tocaron en Bellas Artes. Creo que de mis conciertos favoritos de la vida es el primer concierto de Juan Gabriel en Bellas Artes, que lo veo una y otra vez, y otra vez. Entonces, para mí era algo que no pasaba por mi cabeza, y me siento tremendamente honrada, afortunada y agradecida de la oportunidad”.

Oportunidad que convirtió en un éxito más en su carrera, al dar una presentación magistral al lado de Mujeres del Viento Florido. Banda femenil de regional con la que previamente se presentó en lugares como Chile y Nueva York.

@geraldinalazaro #monlaferte #palaciodebellasartes #vientoflorido ♬ sonido original – Geraldina

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Mon Laferte y su Autopoiética Tour

¿Qué sigue para la chilena-mexicana? En 2024, Mon Laferte arrancará el Autopoiética Tour que obviamente tendrá fechas en México, su segunda patria.

¿Qué podemos esperar, porque adelantaste que va a ser algo más teatral?

“Yo quiero que sea más teatral, que sea también más estético pensando en lo visual. Este año pude ir a muchos conciertos y me di cuenta que el público también hoy quiere vivir una experiencia completa, no es sólo como escuchar a alguien que está tocando en vivo, que eso es maravilloso, pero la gente quiere una experiencia. Ya tenemos toda la tecnología ahí a la mano para completar todo lo que es la música, las luces, los visuales, todo. Entonces creo que voy a estar mucho más como pendiente de esa parte que en años anteriores. Obviamente sin dejar de lado la música, que voy a tocar canciones de todos mis discos y también por supuesto de Autopoiética”.

Y si son fans de sus himnos ya consentidos como “Amor completo” y “Tu falta de querer”, dice que “por supuesto” serán parte el setlist. Recuerden que se presentará el 21 de marzo de 2024 en el Palacio de los Deportes de la CDMX, y los boletos ya están en Ticketmaster.

Pero antes de lanzarse al Autopoiética Tour, Mon Laferte planea pasar las fiestas de fin de año en casa con su familia. Y, en una de esas lanzarse a una posada pues le encantan, aunque confiesa que no es buena dándole a la piñata. Al menos podrá echarse un ponche con piquete y, quizá, cantar un poco.

Y ya en el espíritu de la temporada, nos deja este mensaje: “¡Hola, Chilango! Aquí Mon Laferte. Pues Feliz Navidad, Feliz Año Nuevo, les deseo lo mejor para el próximo año, y nos encontramos ahí en la música, en los conciertos. Un beso”.

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