Los estadounidenses de Mastodon ofrecieron una descarga de 60 minutos de metal sin misericordia. Los violonchelistas de Apocalyptica ya habían dejado prendidos a los seguidores de este género caracterizado por su rudeza y velocidad. Así que para cuando aparecieron el bajista Troy Sanders y compañía, los fans ya estaban puestos para seguir sacudiendo sus cabezas.
Mastodon
Originarios de Atlanta, Georgia, estos metaleros surtieron ráfagas de riffs y solos que se esparcían por todo el escenario Tecate Titanium. El grupo tocó canciones como “Blasteroid”, “High road” y “Oblivion”. Las piezas encendieron a un público que no llenó el campo frente al escenario, pero con bastaste actitud a la hora de agitar el cráneo y hacer el air guitar. La banda dio la bienvenida a los asistentes en un breve y claro español: “Buenas noches, Ciudad de México”.
Y la descarga metalera se abrió paso de la mano de letras sobre bestias míticas o elementos como el fuego o el agua. La lluvia había desaparecido y el frío crecía, pero eso no importó para los cientos de jóvenes que querían ver a una de las bandas más populares del nuevo metal estadounidense, y de cuyo Leviathan, uno de sus discos más celebrados, sonaron rolas como Aqua Dementia y Divinations.
