Ganadores de los MTV VMAs 2014

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La mezclilla nunca morirá (Getty Images)

De la alfombra roja con la llegada de Katy Perry —recordando a Justin y Britney con la mezclilla hasta en las orejas—, a la presentación de Ariana Grande. Así comenzaron los MTV Video Music Awards 2014. La inmediatez de la actualidad no podía estar representada de mejor manera.

A Ariana Grande —que de grande no tiene nada, pues mide 1.53 cm—, la siguió Nicki Minaj y una actuación en vivo del video más visto de las últimas semanas “Anaconda”, y al final Jessie J, para unir los tres talentos en un acto culminante. Esos sí son premios, señoras y señores. Podrá o no gustarte la cultura pop y demás cosas, pero los VMAs reúnen las caras que todos, alguna vez, hemos visto. Desde las Kardashian bien arregladitas, hasta un Travis Barker expectante de lo que sucede en el escenario. La crema y nata de la farándula estaba congregada.

78400La chiquita Ariana Grande fue una de las premiadas

La chiquita Ariana Grande fue una de las premiadas (Getty Images)

Gwen Stefani y Snoop Lion (¿Dogg?) fueron los encargados de develar la primera categoría, “Mejor video de artista femenina”, en donde la competencia estaba ruda contra Lorde, Ariana Grande, e Iggy Azalea, pero al final, la señorita Perry ganó por “Dark Horse”. Y así comenzó la fiesta.

Algo que me llamó la atención —y luego me llamaron “perdedor” por no saberlo— fueron los subtítulos. Según yo salían desde la primera vez de la transmisión, pero luego me di cuenta que eso habría sido un trabajo arduo hasta para el más veloz de los mecanógrafos y obviamente no lo iban a hacer en tiempo real. Tenía años de no ver unos VMAs en vivo, y a mi mente vinieron las noches de adolescencia en las que esperaba la gala para comentarla al día siguiente en la congelada clase de Educación Física a las 7 am. Además de molestar al pumita o aguilaucha —le voy a las Chivas, y qué— que había perdido en la jornada futbolera.

Momento de más música. Taylor “la Bulleada” Swift subió al escenario con un séquito de trajeados que tenían buen ritmo, y una crop top (a veces me asusta que conozca estos términos, aunque tal vez me equivoque de prenda) y faldita de brillitos, como la que usarían en uno de esos bailables interpreparatorianos que antes pasaban en canal 4. Estuvo padre su actuación brodwayesca de “Shake It Off”, aunque me la molesten duro y tupido.

El “Mejor video de artista masculino” según yo estaba cantadito para “Happy”, pero, oh, sorpresa, el pelirrojillo Ed Sheeran se lo llevó por “Sing”, aunque siendo justos, Pharrell también estaba incluído en el éxito, como probablemente lo esté en todos los éxitos del año y de la vida, porque al parecer, nunca envejece y es inmortal y seguirá aquí hasta el fin de los tiempos, junto con Cher, Chabelo y las cucarachas.

Después anunciaron a Jay-Z y salió un vato que no era Jay-Z, y pensé que ya no escuchaba bien. Pero luego entendí que era una especie de parodia, pero ni me dio risa. Estuvo chafa. Luego, salieron Dumb & Dumber. Una parte de mí se estremeció recordando al carrito de perro y todo eso. Venían a presentar al “Mejor video pop”. Y mis predicciones de nuevo cayeron estrepitosamente. Creo que tuve que estar más en Estados Unidos para saber que lo de Ariana Grande con Iggy Azalea era realmente una big thing, pues ella se llevó el galardón. Ya saben, el viejo discurso de agradecer a quien colaboró con ella, que no tiene un discurso preparado, agradecer a los padres y a MTV y bla bla bla, todo lo que siempre tienen que decir. Las veces que neta hacen algo chido, son las mejores.

#MILFMil (Getty Images)

Kim Kardashian West salió para demostrar que es la Ultimate MILF sobre la Tierra, y presentó a Sam Smith —quien vendrá al Corona Capital— para que interpretara la plegaria “Stay With Me”. ¿Con esa vocecita qué mujer le negaría la compañía de su brazo?

Con un discurso sobre la importancia del Hip Hop y su mensaje social, se anunciaron los nominados. “De Public Enemy a Kendrick Lamar…”, el ganador fue Drake, quien no pudo ir a la ceremonia y nos ahorramos un agradecimiento más. ¿Qué tal que él sí se habría animado a armar la polémica chida? Nunca lo sabremos.

Entre tanto corte, nos estaban bombardeando con la rola de Acapulco Shore, el nuevo reality de MTV Latinoamérica, en donde unas chamaconas y algunos mameys y un mirrrey, se la pasarán en antros, playas y bebiendo. Algo que seguramente no les costará mucho. ¿Van a ver el programa? No está de más dejar un rato las lecturas filosóficas y la cruzada intelectual para dejar que las neuronas descansen un poco viendo contenido de poco valor pensante.

Fanfarrias para recibir a Usher. Todo de blanco y con una coreografía que por momentos intentaba emular al Rey del pop, el muchachito cantó junto a Nicki Minaj mientras le aporreaba la retaguardia con su hombro y hasta con la mano. Todos de blanquito, muy bonito. Al parecer a los asistentes les encantó, pues los vitorearon harto.

Momento de las risas involuntarias. Lorde ganó “Mejor video de Rock”. Así como lo leen. Ya no entiendo nada. Ya no sé ni cómo me llamo. Lorde enfundada en negro, al más puro estilo #darks, y con su acento que suena tan propio a pesar de que pueda estar diciendo vulgaridades, agradeció a su director. Y, bah, la menos culpable es ella. Su rola está chida y qué bueno que ganó. Fin.

#TodosSomosDarkzPorLorde (Getty Images)

5SOS apareció en el escenario. A mí me habría parecido el momento perfecto para que los grillitos hicieran su aparición, pero en su lugar, se desataron los gritos adolescentes. Seguro que éstos ganan “Mejor grupo de rock” en algunos añitos. El bataco con look Mötleycrüeano, el vocal hijo de Billy Joe Armstrong, con el pop pesado circulándole pesadamente en cada arteria de su cuerpo. Dejad que las niñas griten. En cuanto al “Artista a ver”, las muchachitas de Fifth Harmony se llevaron la noche, entre sonrisas y gritos. Futuro les auguramos, chavas. Y mientras celebraban, antes del corte tuvo lugar un pequeño homenaje al gran Robin Williams, ídolo de todos.

JLo salió (con el mejor outfit de la noche ever) a presentar a la que, según ella, era la única artista desde los Beatles en tener número 1 y número 2 en las listas de popularidad: Iggy Azalea para presentarse por primera vez junto a Rita Ora, en vestuarios negros contrastando con las albas telas de Nicki Minaj junto a Usher. Bonita presentación. Seguidita de otro bombardeo de la rola de Acapulco Shore, Maroon 5 y su líder que tiene el súper-poder de derretir a todas las mujeres del mundo, hicieron su aparición en un escenario fuera del foro de los VMAs.

A riesgo de parecer un maldito egoísta despreocupado de su entorno, digo: qué jalada la de Miley Cyrus. El “Video del año” fue para la hija de Billy Ray, ahí todo muy bien. Pero, ¿qué onda con la aceptación? Y no digo qué jalada por el mensaje, está chido que cree un poco de conciencia acerca de la situación de algunos indigentes en Los Angeles, pero las lágrimas, la cara y todo lo relacionado con su reacción me parecieron sobreactuadas. En fin, no estamos para ser haters, y qué bueno que utilizó un medio tan masivo para promover un mensaje positivo para la comunidad en general.

En fin, otros VMAs transcurrieron, y me llevaron directito a mi adolescencia, algo que agradezco. Estuvo bueno el espectáculo y seguro mucho más para los que asistieron. La noche la cerró una que siempre de los siempre está presente en cualquier show grande que se precie de serlo, la señorita Beyoncé Knowles. Noche redonda aunque no hubo un regreso memorable, una presentación emblemática o alguna polémica pa’ posterizar en la eternidad, pero pues es MTV y llevan 20 mil años en la industria del entretenimiento. Saben lo que hacen.