Producto de una canción compuesta entre amigos (sí, la famosa “Steady as She Goes"), The Raconteurs es la expresión máxima del gusto y amor a la música que tiene Jack White (y el resto de los integrantes del supergrupo). Para desfogar sus bríos creativos, fuera del proyecto con su ex-esposa, se juntó con Brendan Benson, cantautor de renombre en el circuito indie, y reclutó al motor rítmico de los Greenhornes (a quienes produjo en una amistad-padrinazgo de antología).
El resultado: un disco que salió casi a la par del quinto disco de los White Stripes llamado Broken Boy Soldiers. Un disco sólido, diametralmente distinto a la propuesta de los Stripes y un proyecto fortalecido gracias a la radio y al creciente público de culto de Jack White.
El culto a los Raconteurs (cuenta-cuentos, en francés) se robusteció con la salida de su segundo álbum. Consolers of the Lonely es una colección de canciones emotivas, que van directo al corazón y que muestran el poderío de White ejecutando y orquestando un proyecto de música pop.