Parece que fue ayer cuando el movimiento punk impactó en la forma de pensar, vivir, vestir y hacer música. Sin embargo, de esa época de rebeldía ya pasaron cuatro décadas.
Para recordarlo y mientras continúa el debate si el punk está o no muerto, te presentamos esta lista con cinco de los discos más representativos de 1977 y que este año ya llegaron o pronto entrarán al cuarto piso.
1. The Clash – The Clash
Desde el principio el cuarteto londinense presentó una forma de hacer punk muy distinta a los Pistols o toda la oleada que permeaba Inglaterra. Para empezar, su instrumentación era más limpia.
Mick Jones era un guitarrista con formación en el glam rock, Topper Headon había creado su estilo en la batería basado en el jazz, Paul Simonon no sabía nada de instrumentos, pero después se convirtió en uno de los bajos más representativos del género y Joe Strummer… Joe siempre fue un erudito musical.
Luego la manera de expresar el descontento ante la falta de trabajo para los jóvenes (“Career oportunities”), la invasión ideológica de Estados Unidos (“I’m so bored with the USA”) o la crisis que atravesaba su país (“London’s burning”), distaba mucho de las composiciones de sus contemporáneos, porque además incorporaban sonidos de reggae, ska y mezclas jamaiquinas.
2. The Sex Pistols – Never Mind The Bollocks here’s The Sex Pistols
Quizá no exista disco más representativo del punk británico que éste. Lleno de rabia y frustración de acuerdo al propio Johnny Rotten —ahora Lydon y tristemente partidario de Donald Trump—, fue el escape de miles de jóvenes ingleses que se sentían discriminados por el gobierno. No sólo de anarquía hablaba el álbum.
Tocaba temas delicados como el aborto en “Bodies”, atacaba a las disqueras con “EMI”, la ignorancia de los jóvenes en “Pretty vacant” y, por supuesto, la gran crítica a la monarquía de “God save the queen”.
A pesar de ser músicos inexpertos, fue el espíritu del DIY, tanto en música como al vestir, lo que hizo clásicos a los Pistols y a la vez lo que los hizo durar tan poco. A la fecha quién no recuerda a Sid Vicious torciendo el labio, a Steve Jones con su chamarra de cuero y a Paul Cook con esas playeras rotas de Gran Bretaña.
3. Ramones – Rocket to Russia
Estados Unidos también dio algunos de los mejores ejemplos de punk rock. Este álbum significó la consolidación del grupo en la escena, justo un año después de su debut.
Joey, Johnny, Dee Dee y Tommy tampoco eran los mejores músicos del mundo, pero lograban un sonido rápido característico y que si bien, no tenía la crítica social tan directa de los ingleses, sí hablaba de enfermedades mentales y problemáticas juveniles.
Dio bellezas siempre con duración menor a tres minutos y que hicieron del CBGB el lugar de onda que alguna vez fue, como “Cretin hop”, “Teenage lobotomy”, “I wanna be well” y por supuesto, “Sheena is a punk rocker”.
4. The Damned – Damned damned damned
Inglaterra dio algunos de los actos más fuertes de punk y este cuarteto londinense no fue la excepción, sólo que se trató de uno de los pioneros en incorporar el sonido gótico que después crearía su propio movimiento en 1979. Algo que los hace muy especiales.
Este fue su disco debut y de hecho en el mismo año sacaron otro álbum llamado Music for pleasure, que no pudo superar ni las letras ni el feeling de su antecesor. Y mucho menos la emblemática portada con los pastelazos en la cara de los integrantes.
Brian James es quizá uno de los guitarristas menos valorados de la historia y parte de su talento está presente en “Born to kill”, “New rose”, “1 of the 2” o “I fall”, temas que tenían un toque mucho más depresivo que el de otras bandas en la escena.
5. The Jam – In The City
También ingleses, se trató de uno de los grupos a los que The Who marcó tanto musical como ideológicamente. A diferencia de la ira de Sex Pistols o la crítica de The Clash, The Jam proponía una mejora a su país a través de sus letras. Eran más positivos por así decirlo.
Esta producción debut es tal vez lo mejor de su repertorio y al igual que The Damned, fueron de los primeros en incluir otros sonidos como el new wave que después reinaría en los 80. “In the city” es la canción más recordada, pero también vale la pena echarle oído a “Time for truth”, “Art school”, “Sounds from the Street” y “Non-stop dancing”.
Otros discos lanzados en ese año y que merecen estar en la colección de cualquiera que se considere melómano: Iggy Pop – Lust for Life, Television – Marquee Moon, Suicide – Suicide, Talking heads – Talking Heads: 77 y The Boomtown Rats- The Boomtown rats.