Ahora puedes alquilar la casa de Jaime Maussan en Desierto de los Leones

La casa de Jaime Maussan en Desierto de los Leones es todo lo que podrías esperar.

Sí: una (reproducción de una) momia no-humana. Sí: hay una casa que parece transporte de otro planeta. Sí: hay reliquias espaciales. Pero también hay muchas otras cosas, que revelan el lado oculto del periodista que siempre ha buscado el lado oculto. ¿Lo mejor de esta casa? Ahora es posible rentarla para una estancia temporal, para pasar un par de días como el periodista que vive más allá de las estrellas.

Pero, antes de hablar de la casa, hay que hablar un poco de Jaime Maussan. Casi todxs lo conocemos como el periodista que habla del fenómeno OVNI; el que el año pasado presentó ante el Congreso unos cuerpos momificados de seres no-humanos. Para muchas personas, es un charlatán, objeto de burla incluso. Pero no hay que olvidar una cosa: Jaime Maussan es uno de los periodistas más experimentados del país, su carrera va más allá de los temas convencionales. 

Foto: Cortesía Jaime Maussan
Foto: Cortesía Jaime Maussan

Y sí, los extraños objetos voladores son uno de ellos, pero otro es la crisis climática. La mayoría de las veces, su búsqueda por seres de otros planetas opaca el hecho de que Maussan fue el primer periodista mexicano en hablar de crisis climática, a principios de los años 1990. Por aquel entonces, este tema parecía un escándalo menor, una exageración. Tristemente, hoy vemos que siempre ha sido el tema urgente. Y Jaime lo dijo antes que nadie, hace más de 30 años.

De modo que, más allá de ser un entusiasta de la vida fuera de la Tierra, Maussan es un entusiasta de la vida, toda ella. Y su casa en Desierto de los Leones da fe de ello en cada rincón.

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Jaime Maussan nos mostró su casa

Primero, se trata de una casa absolutamente sustentable. Está bien arriba en el bosque, en medio de coníferas. No se ve desde la carretera, porque la casa es subterránea, y eso no es casual. Lo explica el propio Jaime: “La hicimos de esta manera para no tirar ni construir nada. Yo quería vivir en el bosque, así que adquirí 1200m2. Conocí un libro de un académico de la Universidad de Minnesota que hablaba sobre casas subterráneas. Platicando de eso con un amigo, hablamos de hacer una, y él me dijo que la hacía. Días después vinieron unos trabajadores que empezaron a hacer hoyos. Yo ya ni me acordaba, pero les dije: vamos a hacerla.

“Ganaba muy poco, así que pagarle a los dos albañiles me costó, pero la fuimos desarrollando de a poco. Para que no agrediera al medio ambiente, fuimos tomando decisiones arriesgadas, que resultaron muy inteligentes. Estar bajo tierra le da muchas ventajas: conserva mejor la temperatura, casi no se sienten los temblores, está protegida.

“Yo creía que íbamos a poner placas de acero pero no, me explicaron que construirla con forma huevo le da resistencia estructural. Lo increíble es que el techo no tiene ningún refuerzo, es simplemente el adobe y aún así no se rompe. Me parece que es una manera inteligente de vivir. Está controlada la humedad, es una maravilla en términos hidráulicos y tiene calefacción. Y mira: la casa tiene 30 años y aquí está, no le ha pasado nada”.

Todo esto lo cuenta Jaime mientras da un recorrido por las habitaciones de su casa, que tiene interiores de madera (toda ella de árboles ya muertos), y que está repleta de vestigios de una vida dedicada a mirar el mundo de otro modo: sí, hay una habitación dedicada a la carrera de Maussan (recortes de periódico, figurillas de extraterrestres, y hasta una réplica de las momias no-humanas que presentó el año pasado), pero también hay muchos objetos personales, que van desde juguetes para cachorro (Jaime adora a los perros: tiene más de una docena en esta propiedad) hasta fotografías familiares. 

“Esta casa es lo que soy yo”

La casa tiene más de una entrada. Una de ellas, cubierta de láminas de cobre (“el señor que las puso decía que eran para las buenas vibras”), alberga un telescopio para ver la luna y una reliquia espacial de Jaime: un asteroide hecho de una aleación imposible. 

Esta casa entera es un testimonio de la carrera de Jaime Maussan, que más allá de otras órbitas, ha estado dedicada a hablar por otros seres vivos. “Esta casa es lo que yo soy, demuestra lo que yo pienso: que cada quien debe hacer lo que pueda hacer por salvar este planeta”. 

Foto: Renata Bolívar
Foto: Renata Bolívar

Uno de los patios de la casa da cuenta de una tragedia: en 2018, una serie de eventos desafortunados provocaron un incendio que mató a muchos de los animales que vivían ahí. Jaime habla de ese evento con tristeza profunda, y no dice mucho más. Pero la placa que puso en ese patio evidencia lo que esta casa representa en la vida y la carrera de Jaime Maussan, y cuál es el mensaje que tiene para sus próximos visitantes (terrícolas o no): “A nuestros amigos, las personas no humanas. 18 de mayo 2018. Familia Maussan”.

Foto: Cortesía Jaime Maussan
Foto: Cortesía Jaime Maussan

¿Cómo quedarse en la casa de Jaime Maussan en Airbnb?

Jaime Maussan será el anfitrión en Airbnb para celebrar la primera noche de la Semana del Espacio en su hogar. Durante la estancia, los huéspedes podrán: 

  • Disfrutar de una vista única del cielo en el observatorio de la casa desde donde podrán investigar las verdades que se esconden en los oscuros rincones del cosmos.
  • Entrar en el búnker donde Maussan ha guardado valiosas pruebas de descubrimientos espaciales y extraterrestres que han marcado su carrera como investigador.
  • Explorar la vegetación de la extraordinaria reserva del Desierto de los Leones. 
  • Deleitarse con una comida ancestral preparada por el propio Jaime 

Cómo reservar

Lxs fans de Jaime Maussan podrán reservar este espacio sin ningún costo por una única noche a través de Airbnb a partir del próximo 25 de septiembre desde las 11:00 horas, tiempo de la Ciudad de México en airbnb.com/casadejaimemaussan, y la estancia sucederá entre los días 5 y 6 de octubre de 2024.

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