Síguelo en twitter: @el_androide
Capaz de trascender generaciones y etiquetas, el arte de
Derek Hess ha paladeado las delicias de la serigrafía, el dibujo y la gráfica
pop.
Pocos artistas visuales e ilustradores guardan un vínculo
tan estrecho con la música como él. Sus matadoras ilustraciones para flyers, posters y portadas de discos remiten a los más grossos y honestos sketches.
Lápices, tintas y acrílicos son testigos
de su próspero trayecto iconográfico-musical. Perversas agrupaciones de la
calaña de Los Melvins, Clutch, Converge, Reverend Horton Heat, In Flames e
Isis, yacen como protagonistas.
Esqueletos, seres alados y toscas mujeres mecánicas se dan
cita en los montones de ilustraciones del buen Hess. Su trabajo alcanzó un
grado de culto tan alto en la galaxia musical que existe el HessFest, donde las
bandas que participan se sienten contentas con una caja de cerveza. Pero
sobretodo, el honor de formar parte del repertorio gráfico del hijo prodigo de Cleveland.
En esta ocasión, Derek Hess utiliza portadas viejas de la
época dorada de Playboy como canvas. Trece
piezas maestras donde las poses de las chamacotas y lo deliberadamente
sugerente de las imágenes remiten a los 96
nudes + de Ashley Wood. Las bellezas del refinado conejo de corbata
elegante nunca lucieron tan explicitas y burdas.
Quince años de afiches para conciertos, arte para discos y
hasta comisiones políticas (para la campaña de Obama), caminando por las
arenas movedizas del cartelismo y las melodías del punk y el metal.
Actualmente, Hess engrosa su repertorio personal y se
encarga de su marca de ropa Strhess.
Les dejamos un bonito video sobre la mercancía oficial de
Clutch. Claro, enaltecida por el arte del gran Hess.
