La comunidad LGBTIAQ+ está presente en toda la ciudad: infancias, juventudes, personas adultas y adultxs mayores, todxs tenemos el derecho de vivir de manera plena y segura. No obstante, existen factores externos que vulneran a las disidencias sexogenéricas. En respuesta a la no garantía de los derechos de la comunidad, hay espacios seguros, como la Casa de Día para el Adulto Mayor, Vida Alegre, donde las vidas de todes son celebradas y procuradas.
Samantha Flores, fundadora de la asociación Laetus Vitae y de esta Casa de Día única en su tipo, reconoce que existen retos muy específicos que atraviesan a la población mayor y a quienes, además de experimentar la vejez, forman parte de la comunidad queer. Flores, que reconoce el privilegio de haber sido aceptada por su familia cuando se nombró como mujer trans, además de llegar a vieja sabe que las personas adultas mayores en México viven en un estado de abandono y soledad. A esta negligencia se agregan, en ocasiones, las discriminaciones por la identidad de género o la orientación sexoafectiva de las personas.
México es uno de los países más peligrosos para las personas disidentes de género, particularmente las mujeres trans, para quienes en 2020 se estimaba una esperanza de vida no mayor a los 35 años. La discriminación y el discurso de odio matan y colocan al margen a las personas LGBTIAQ+. Fue su deseo por contrarrestar la violencia, arropar a su comunidad y ofrecer el cuidado que ella recibió lo que movilizó a Samantha Flores a planear, hacer campañas y finalmente inaugurar la Casa de Día para el Adulto Mayor, Vida Alegre, donde ofrecen apoyo psicológico y espiritual, acompañamiento y actividades culturales, entre ellas un cineclub de filmes con temáticas queer. Todos sus servicios son gratuitos.
VIDA ALEGRE, LAETUS VITAE
Flores, quien comenzó a luchar por los derechos de la comunidad LGBTIAQ+, personas con VIH y otros grupos vulnerados, tras la epidemia de sida que se llevó consigo a cientos de conocides y amistades suyas, ha dedicado su vida al activismo. Así, convencida de ayudar a las personas adultas mayores, creó un espacio seguro donde la colectividad y el cuidado van primero siempre.
Después de cerrar sus puertas debido a la pandemia, la casa de día reabrió y hoy se mantiene en pie. Sus talleres, espacios de debate, carteleras culturales y acompañamiento psicológico y espiritual promueven la idea de que las personas adultas mayores son parte de la sociedad, merecen salud y compañía, y no son una carga ni un estorbo.
Samantha Flores es una mujer que, en sus casi nueve décadas de vida, ha vivido de manera plena. Con esa sonrisa que la caracteriza, en su adultez comenzó a luchar por los derechos de la comunidad LGBTAIQ+ y las personas VIH positivas. Hoy mantiene vivo su sueño por medio de este primer y único asilo de día gratuito para las personas adultas mayores en el mundo.
La Casa de Día para el Adulto Mayor, Xola 184 B, Álamos, vidaalegre.org
Espacios seguros para la comunidad LGBTIAQ+
Casa Refugio Frida
Este espacio fue creado durante la pandemia por covid-19 cuando sus fundadores, entre ellos Raúl Caporal, reconocieron el “creciente número de personas parte de la comunidad LGBTIAQ+ en situaciones de peligro críticas, muchas de ellas habiéndose quedado sin trabajo o viviendo en casa con gente que las agrediese”. Con el paso del tiempo han construido un modelo de acompañamiento integral para lxs habitantes de la casa.
Hogar Paola Buenrostro
Nacida en 2020 del trabajo de la asociación Casa de las Muñecas Tiresias, fundada por Kenya Cuevas, la Casa Hogar Paola Buenrostro es un refugio destinado a mujeres trans. Las habitantes de la casa reciben acompañamiento y asesoría médica y psicológica que les permite reinsertarse a la sociedad de una forma segura.
Manos amigues
Este comedor de beneficencia y foro cultural LGBTIAQ+ ubicado en la colonia Guerrero ofrece comidas completas a sólo $11 de lunes a viernes de 13 a 16 h. Actualmente el comedor comunitario sirve más de 200 comidas al día y ahora busca crecer de manera exponencial, ayudando así a cualquier persona que lo necesite, forme o no parte de la comunidad queer.
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