Spotify es una de las plataformas de streaming más populares del mundo. No es la número uno —ese honor le corresponde a YouTube—, pero sí cuenta con millones de usuarios y su influencia en la forma en la que consumimos música en la actualidad es innegable. Esta semana se hizo público que su interfaz ofrece una nueva función para sus suscriptores: la de bloquear artistas. Es decir, si uno decide, por poner un ejemplo, silenciar a J Balvin, este artista no solo dejará de aparecer en las populares playlists personalizadas que diseñan los algoritmos de la plataforma, sino también de las listas que uno sigue de sus amigos o de medios de comunicación. También desaparecerá de las listas de popularidad que uno revisa. Es decir, se lo tragará el ciberespacio. Y para que uno vuelva a encontrar sus canciones en algún lado tendrá que desbloquearlo. De momento, esta función está en su etapa de prueba y, aparentemente, está disponible para pocos usuarios únicamente en la aplicación para teléfonos.
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De acuerdo con una columnista llamada Hazel Cills, del siempre aguerrido portal llamado Jezebel, este botón se ha incluido gracias a “la creciente presión de campañas como #MuteRKelly, que durante mucho tiempo ha pedido que se elimine a R Kelly de los servicios de transmisión en respuesta a las acusaciones de agresión y abuso sexual en su contra”. Recordemos que hace unos meses, Spotify intentó resolver el asunto eliminando tanto a Kelly como a XXXTentation (ahora fallecido, también acusado de ser violento con mujeres) de las listas de reproducción más populares. La decisión se echó para atrás cuando algunos artistas —notablemente, Kendrick Lamar— dijeron que eso era censura (con tintes de racismo) e incluso amenazaron con boicotear. Es un tema delicado en el que se confrontan diferentes posturas. Quizá por eso, ahora, Spotify ha decidido que cada quien censure a quien considere necesario o que lo merezca. Pero para la columnista no es suficiente: “Un simple botón silenciador ignora el objetivo de los manifestantes, que no es solo silenciar a los artistas individualmente, sino también para que los sistemas que los apoyen piensen críticamente acerca de sus acciones”. Y me quedo pensando: ¿serán las conductas problemáticas de ciertos artistas lo que hay detrás del botón de mute? ¿O simplemente decidieron hacerle un favor a quienes de repente estamos hartos de un artista o de un tipo de música? No lo sé, y no ha habido pronunciamiento de la empresa al respecto.
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Más allá de las cuestiones políticas que se encuentren detrás del silenciador, yo lo agradezco. Hay muchos artistas de los que ya estoy harto. Otros que no suelen aparecer en mis listas, pero por si las moscas. Ahí les va mi lista. Les advierto que tiene algo de corrección política:
– Maná
– Nickelback
– Chris Brown. Por usar de “punching bag” a mi querida Rihanna.
– Calvin Harris
– Queen. Sí, lo siento, ya me hartó; igual me pasa pronto.
– Kid Rock. Además de que su música me parece horrorosa, no soporto sus posturas políticas similares a las de su admirado Donald Trump.
– Fito Páez. Nada contra él, solo no me gusta su música y me aparece TODO el tiempo en las listas con sugerencias de Spotify, ¿pooor?
– El Otro Yo. Pensar en los casos de #MeToo en los que se ha visto envuelto su cantante me da asco y repulsión.
– Imagine Dragons
– Maroon 5
Estos son los primeros 10. Pero si me pongo a rascarle, seguro saldrán más. ¿Ustedes harán su lista de “silenciados”?
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