¿Sexo en la primera cita?
Por: Nancy Martinez García
Y ahí estás: arreglándote para salir por fin con Rubén (o con Patricia). Pasaron semanas (o meses) para aventarte e invitarlo/a a salir. No fue una tarea fácil, tus impulsos frenados por tu extrema timidez hicieron que este día se retrasara tanto. Pero bueno, por fin llegó.
Al salir, todo pinta muy bien: cine, cena y una plática interminable llena de risas y contacto físico. El lenguaje físicoes bien certero y la neta, uno ya se las sabe. Tocar un poco el brazo, rosar la pierna… ah, tantas cosas que nos hacen decirle a la otra persona: oye, me gustas.
Al final de la noche se despiden. Se abrazan y la cosa se prolonga hasta llegar a un beso largo, muy largo. Quizá las manos no se mantengan quietas y se dirijan hacia otros sentidos. Abajo, un poco más abajo… ahí. Y la cosa se pone más candente.
Te preguntas: ¿aflojo? ¿me aguanto? ¿qué pensará si…?
Bah, qué diablos, suben a tu departamento y a darle que es mole de olla.
Quizá al día siguiente despiertes y digas: la cagué… o no. Vamos, mucho nos han dicho que no hay que aflojar de buenas a primeras, que no nos van a tomar en serio, que si queremos algo para un buen rato hay que aguantarse, algo así como: “date a deseo y olerás a poleo”, como decían las abuelitas.
Ay, pero ya estamos en pleno 2014 y las cosas no son iguales que hace millones de años en los que las mujeres no podían invitar a salir a alguien y en los que un hombre era considerado el galante que debía aceptar todo cuanto la damisela indicara.
Así que desmenucemos los pros y los contras del sexo de la primera cita:
Pros
- *Sabes a lo que te enfrentas si se convierten en una pareja formal. Digamos que tienes la oportunidad de calar la calidad.
- *Te ahorras justificaciones durante el tiempo que sigan saliendo. Si se les antoja ponerle, pues van.
- *No, no se pierde la magia, simplemente desvelan los trucos para poder tener mejores actos.
- *Oportunidad de experimentar. El sexo dejó de ser LA muestra de amor. También es una puerta abierta a descubrir el placer y conocer el propio cuerpo.
- *Quien te valora por tener o no tener sexo en la primera cita es un perfecto/a idiota. Las personas no se valoran por la cantidad de encuentros sexuales que han tenido en sus vidas ni por la calidad de éstas. Hay un mundo allá afuera.
Contras
- *No podemos negar que lo que se cuece a fuego lento a veces suele ser más chido al final. Como que ese misterio que imprime la ignorancia de saber de qué lado masca la iguana con la otra persona, le da un sazón diferente a las cosas.
- *Sí, la otra persona puede vivir en el siglo XVII y pensar que eres un/a facilote.
- *Se acabó la diversión. Los juegos preliminares y el coqueteo prolongado hacen que las cosas se pongan a tono.
- *Vivirás con la incertidumbre. No sabes si te volverá a hablar o si las cosas se fueron al caño.