7 mitos y realidades sobre la infidelidad
Por: Verónica Chávez Aldaco
El tema de las infidelidades siempre resulta escabroso, porque muchos quieren buscar en las experiencias de los demás, la forma de justificar que también le entraron a este rollo.
Nadie en este mundo, en su sano juicio, querría ser víctima de una pareja infiel, pero qué tal cuando a esa misma persona se le presenta la oportunidad, ¿cómo lo resuelve?
En todo este asunto existen muchos mitos y realidades que a continuación vamos a desenmascarar.
1. Las aventuras ayudan a superar las crisis
Si eres de los que piensan que una tercera persona es necesaria para equilibrar la rutina del matrimonio, estás equivocado. Tal vez al principio el infiel se sienta más motivado o de mejor humor, que puede transmitir cierto optimismo en su pareja. Pero, ser infiel representa terminar con el compromiso y la confianza, los factores detonantes en una ruptura.
2. El sexo es la razón de toda infidelidad
Cuando uno se atreve a dar el paso de serle desleal a su pareja es, fundamentalmente, porque encuentra en otra persona aquello que no logra en su matrimonio, por lo que el sexo no es el motivo principal. Es sorprendente que en engaños duraderos, la pareja no se da cuenta de que la están engañando. Esto se debe a una escasa comunicación entre ambos y a que ya no comparten el tiempo como antes.
3. Es más fácil descubrir a un hombre infiel que a una mujer
Lo que ocurre es que el hombre no presta tanta atención a la mujer como para notar ciertos detalles, mientras que las mujeres son más observadoras y al mínimo signo podría sospecharlo.
A la mujer, por lo general, se le puede notar más por su actitud y comportamiento.
4. Si fue infiel, lo volverá a ser
Aunque la afirmación puede sonar lógica, en ocasiones el arrepentimiento es real y los esfuerzos por recuperar a la pareja son reales. Otra cosa es que su currículum amoroso llegue a nosotros cargado de infidelidades. Conviene no bajar la guardia, si se decide arriesgar por esta relación.
5. Siempre hay que confesar una infidelidad
Para algunos expertos en terapia de pareja, si estás dispuesto a acabar con el engaño, es mejor no confesar para no romper la confianza en la relación. Sin embargo, cuando la relación se ha visto muy deteriorada desde que se produjo el engaño, resulta conveniente ser sincero para que la pareja encuentre sentido a todo lo que está pasando y, si decide perdonar, buscar juntos una solución.
Otros terapeutas optan por contar la verdad y afrontar la situación para mantener la sinceridad ante todo y pensado en que, antes o después, uno puede ser descubierto.