La Secretaría de la Cultura de Cultura en la Ciudad de México inició el proceso de restauración del Museo Panteón de San Fernando. Estas labores se enfocarán en labores de restauración y grietas estructurales en algunos muros.
Además, este proceso de restauración del Museo Panteón de San Fernando también hará la restitución de aplanados y tratamientos de la viguería de madera.
Este recinto cuenta con muros y viguería que fueron construidos durante la primera mitad del siglo XIX, estas estructuras fueron afectadas por el sismo del pasado 19 de septiembre de 2017.
¿Por qué se hará la restauración del Museo Panteón de San Fernando?
Algunas partes serán intervenidas para lograr que la estructura del recinto este consolidada. Este año cumplirá su 15 años como Museo. El pantéon de San Fernando cuenta con relevancia histórica, arquitectónica y patrimonial.
Gran parte del arte funerario del siglo XIX de nuestra ciudad se encuentra ahí. También alberga los restos figuras importantes de la época como Benito Juárez, Vicente Guerrero, Ignacio Comonfort y Francisco Zarco, entre otros.
El proyecto de restauración del Museo Panteón de San Fernando inició a mitad de enero pasado y se espera quede listo en abril. El museo tuvo una primera intervención en 2019 para arreglar los problemas a causa de la humedad.
Los encargados de esta nueva restauración serán los expertos, Fausto Olivares Beltrán y Xochiquétzal Rodríguez Horta, que trabajarán en el primer y segundo patio del lugar.
Un poco de su historia
El Museo Panteón de San Fernando, en la colonia Guerrero, es un único en la CDMX. Cuenta con cuatro declaratorias (nacionales e internacionales) que lo consideran Monumento Histórico (1936); Zona de Monumentos Históricos (1981); Patrimonio Mundial, en 1987 y Museo de Sitio.
Desde 2006 abrió sus puertas como recinto cultural que ofrece un viaje por los vestigios de importantes personajes y periodos en la historia de nuestro país y, por supuesto, la Ciudad de México.
El Museo Panteón de San Fernando surgió en 1832 cuando se eliminó costumbre de sepultar en el atrio de las iglesias. Para 1850, durante la epidemia de cólera que azotó a la ciudad de México, se convirtió en cementerio general, pero fue cerrado como panteón en 1871, el 23 de julio de 1872 recibió de manera inédita los restos mortales de Benito Juárez.
La tumba misteriosa
La última tumba que se dispuso en el Museo Panteón de San Fernando fue ocupada por los restos de Benito Juárez, pero en el nicho 19 del entonces abandonado panteón de San Fernando en la Ciudad de México, apareció una tumba misteriosa.
En el patio menor del recinto, hay una tumba con el nombre de la famosa bailarina estadunidense, Isadora Duncan, quien murió en 1927: 55 años después de Juárez.
Isadora fue conocida como la ‘madre de la danza moderna’, también por bailar descalza y por crear coreografías con la música de Mozart y Chopin. La bailarina falleció a los 50 años en Niza a causa de un accidente automovilístico. Nunca visitó México.
Fue enterrada en París en el cementerio Père-Lachaise, pero su nombre apareció en el nicho 19 Museo Panteón de San Fernando y nadie sabe cómo llegó ahí.