Seamos honestos, chilangos, el Sailor Moon Day en la CDMX fue una decepción y lo saben.
Este tipo de eventos dedicados a esos animes/mangas que marcaron una década, y a toda una generación, siempre emocionan. A veces dejan mucho que desear y el Sailor Moon Day en la CDMX se salió de control.
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Acá les platicamos todo sobre el desastre acerca del evento que prometía ser un agasajo para los fans de Sailor Moon y terminó en bodrio, largas filas, y mucha, mucha, decepción.
¿Por qué no estuvo chido el Sailor Moon Day en la CDMX?
Primero lo primero: la filas eran enormes para entrar al sitio, que en realidad es pequeño, los organizadores no se esperaban tanta gente —o no sabían cómo responder— y no se pudo llenar ese vacío que varios fans del manga y anime, manifestaron, al llegar disfrazados de Serena Tsukino, Sailor Pluto y Sailor Mars.
Si no lo creen acá les dejamos el chisme, perdón, los comentarios de todos los asistentes. ?
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Las caras de decepción en las familias (en su mayoría niños) que llevaban horas formados, no mentimos —literal— dos horas, para entrar, eran varias, eran muchas. Se percibían al salir del recinto en la Tabacalera y regresar a casa con las manos vacías.
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Para el Sailor Moon Day en la CDMX se prometió comida alusiva al programa, eventos de cosplay, mercancía oficial y mucho más, sí pasó, pero en pequeña escala —a mediodía ya no había nada— no existió la suficiente comida y mercancía para recibir a tanta gente emocionada.
El lugar estaba lleno y no se podía ver nada
Lo más decente (prudente) por parte de los organizadores y el colectivo de stands, hubiera sido comunicar que el evento había concluido horas antes de lo estipulado, pero como en esta ciudad todo es al “ahí se va” seguían dejando entrar más y más gente.
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Los pasillos todo el tiempo estuvieron intransitables, el calor se sentía en exceso y las bandas que amenizaron el evento se perdían por tanto bullicio. De la selección oficial de merch no se pudo adquirir mucho, es decir nada bueno, y la cafetería que ofrecía bebidas inspiradas en la Sailor Scouts no sobrevivió ni la mitad del evento.
Ya sea una convención, bazar o expoventa de esas que abundan en la CDMX —y muchas veces no son oficiales— lo menos que la gente espera es ver lo que se promete en los eventos, o al menos, algo tan parecido como lo que se lee en medios, posteos de redes sociales y más.
Pónganse las pilas amigos, chilangos, sabemos que fans de animes, mangas, series, programas y fanfics hay muchos y de sobra. Para que estos eventos no terminen en fiasco hay que saber organizar de manera adecuada, no vender de más lo que habrá, y sí, organizarse chido para que la gente lo disfrute. No sé, piénselo.