Colmena 41 es un espacio donde puedes conectar e inspirar a la comunidad LGBT+ de la CDMX.
Ignacio huye por la azotea “pélate” le gritan dos oficiales, mientras otros detienen a 19 hombres travestidos que escapan de una redada para desarmar la fiesta clandestina, en la Tabacalera. A la mañana siguiente todos, aún con el rimel corrido, son obligados a barrer las calles. Menos uno: el yerno del presidente. Así, imagino, que pudo concluir la legendaria noche del llamado “Baile de los 41” en 1901.
¿Qué tanto avanzamos como sociedad desde entonces?, ¿cuánta libertad tenemos para expresar identidad? 41 es precisamente el número que inspiró el nacimiento de Colmena. Un espacio para crear comunidad y buscar lo contrario a esos titulares de 1901: empoderar, fortalecer y ofrecer mensajes positivos para la comunidad LGBT+.
Platicamos con Enrique Torre Molina, activista, conferencista, consultor de diversidad e inclusión para ONG, y Federico Arellano, especialista en emprendimiento, abogado, economista y CEO de MiCochinito.com, acerca de Colmena 41, el espacio para conectar a la comunidad LGBT+ de la CDMX.
El derecho a la representación
Fede recuerda que en su juventud no había figuras profesionales o personajes públicos en los que se pudiera ver representado. En Colmena 41 uno de los pilares para los encuentros de networking y empoderamiento es precisamente la representación. El no saberse solo y entender que eventualmente todo va a mejorar es lo que cada lunes (antes de la contingencia) los asistentes a La Teatrería se llevaban de la colmena a casa.
Enrique se involucró con el activismo LGBT+ cerca de 2006 “recuerdo que en este entonces veía redes, personajes, personas en varias industrias y medios, pero hacía falta algo que los conectara” apunta.
Con el paso de los años, a su trayectoria profesional se sumó la pasión por los derechos humanos dando como resultado que su alianza con Federico, de profesión economista y emprendedor, forjara los cimientos de Colmena 41.
“Somos una organización LGBT+ que cofundamos hace poco más de un año, Fede y yo. Conectar, inspirar, promover el valor entre la comunidad, de diferentes edades, ciudades, profesiones, es lo que hacemos en los Lunes De Colmena 41”, puntualiza Torre Molina, acerca del proyecto.
“En los ‘Lunes de Colmena’ buscamos conectar, buscamos enlazar con procesos de investigación para tomar en consideración cuál es la situación de la comunidad LGBT+, tanto de la CDMX, como en todo el país”, señala Federico acerca de estas reuniones que siempre cuentan con al menos tres panelistas diversos.
En dichos encuentros se abordan temas de la agenda LGBT+, pero también hay espacio para “diferentes puntos de abordaje a problemas de la comunidad, de la manera más integral posible, tomando en consideración que somos muy variados, esa es la riqueza de Colmena” nos cuenta el CEO de micochinito.com.
Por otro lado, Enrique señala que un elemento muy importante dentro de Colmena 41 “es crear espacio, eventos o proyectos que sean interesantes y accesibles para cualquier persona que esté interesada en conocer qué pasa con la comunidad”.
Visibilidad con valor
Acerca de los pendientes en la agenda LGBT+ Enrique Torre nos dice que “la Ciudad de México, a diferencia de otros países (donde ha participado como vocero y ponente), está avanzada en el tema de derechos y libertades, sin embargo, hay muchos jóvenes que aún son desplazados de su hogar por salir del clóset, y esto es algo que se ha hecho más visible durante la pandemia”.
Afortunadamente, existen espacios como Casa Frida que brindan su apoyo a los desplazados, recuerda el activista. El otro tema pendiente “son los derechos de la comunidad transgénero, aún hay muchos crímenes de odio y ataques en su contra” concluye.
Federico piensa que el gobierno tiene responsabilidad, sí, pero también es un tema cultural; por ejemplo, a los medios y a las instituciones les toca poner mayor representación de personajes LGBT+ en sus agendas, “en espacios o lugares que dan visibilidad a la comunidad para que los más jóvenes puedan sentir ese soporte y encontrar esa representación”.
El espacio que presenta Colmena 41 es de representación, visibilidad y voz a la comunidad. Una plataforma que también apela al empoderamiento “por ejemplo, viene alguien de American Express o Facebook a platicar sobre su trabajo, pero también puede ser una chica emprendedora de Culiacán, o un profesional que vive con alguna discapacidad y desempeña excelente su trabajo”, eso es lo que ha construido Colmena 41 al contar con varios actores de distintos sectores que, desde su experiencia, hablan de representación y de cómo han ganado espacios para la comunidad, apunta Enrique.
Un espacio seguro
En estos días es vital ser resiliente.”No estás solo”, “Todo va a mejorar” puede sonar trillado, pero es la verdad… si algo caracteriza a la comunidad LGBT+ es que con todo ese dolor, tristeza o discriminación siempre puede salir adelante, y no solo cambiar el mismo, sino cambiar su entorno y transformar”, Enrique considera que esa resiliencia innata se posee en la comunidad.
Colmena 41 te permite conocer, quizá, a tu próximo jefe, socio, amigo, pareja o ligue; te acerca a la comunidad. “La importancia de reconocernos como comunidad y tener representantes visibles abre la brecha para seguir avanzando y alienta a las futuras generaciones para no tener miedo y vivir su identidad como realmente son”, finalizan ambos fundadores del proyecto que llegó para quedarse en la CDMX.
Sigue “Lunes de Colmena” en sus redes sociales, suscríbete al newsletter de Enrique y comparte con gente que, como tú, vive el #OrguYoChilango todos los días. No solo durante junio. Ser es resistir y aún tenemos mucho por hacer. Hay una deuda pendiente con el resto de los 41 en aquel baile que solo buscaban un espacio seguro para hacer comunidad.