¿Piensas que los niños de ahora ya no son como los de antes? Pues llegó el momento de sentirte todavía más señor, pues daremos una vuelta por los coleccionables de los 90.
En aquella década, las marcas se rifaban un montón y sacaban toda clase de promociones chidas y atractivas. Muchas de ellas consistían en colecciones de figuras inspiradas en caricaturas o película de moda. Otras se enfocaron en conceptos originales que nos volvieron locos.
La verdad es que todo chilanguito noventero cayó en las redes de la mercadotecnia y hacíamos todo lo posible para conseguir estos objetos. Ya sea con intercambios, retas o llorándole al señor de la tienda. ¿Cuántos de ellos tuviste?
Coleccionables de los 90 que todos juntamos
Pepsilindros
La década comenzó con todo, ya que chicos y grandes quedaron fascinados con los pepsilindros. Y es que estos no eran unos termos aburridos y sin chiste. Eran vasos con tapa, popote y válvula protectora con diseños muy chidos de los Looney Toons.
Al principio, se lanzaron cinco modelos diferentes. Tuvieron tanto éxito que después lanzaron otros de la misma caricatura y hasta una colección de Los Picapiedra.
Sabrimágicos
Si no era suficiente con los pepsilindros, otros coleccionables de los 90 fueron los Sabrimágicos. Era una colección de cinco vasos con personajes diferentes de los Tiny Toons.
¿Lo mejor de todo? ¡Cambiaban de color con el frío! Sabemos que actualmente eso no impresiona a ningún niño, pero para nosotros era magia. Además, incluían una especie de portavasos para llevarlo a donde fuera.
Cajita Sonrics
Uno de los mejores coleccionables de los 90 era la Cajita Sonrics. No importaba si no te gustaban todos los dulces que traía, porque tenía figuras ¡HER-MO-SAS!
Y es que cada una de ellas tenía un objeto temático que podía ser el personaje de una caricatura o película de la época.
Y no es mentira que era de los productos más rifados. Pues en sus cajas pasaron colecciones de Batman Returns, Tiny Toons, Looney Toons, Patoaventuras, Chip y Dale, personajes de Hanna Barbera, Los Simpson y hasta de varios personajes de Disney.
Por si eso no fuera suficiente, la Cajita hasta tuvo una colección de personajes clásicos de terror. Se llamó Monstruos de Bolsillo y podías encontrar a Drácula, una momia, fantasmas, entre otros.
Tazos
No podemos hablar de coleccionables de los 90 sin mencionar los famosos Tazos. Y es que pasamos todos los recreos armando retas o intercambios. Claro que para eso gastamos todo el dinero que nos daban comprando productos Sabritas.
Esta magia comenzó con Taz-Manía y Tiny Toons. sin embargo, su éxito hizo que hubiera colecciones de Los Caballeros del Zodiaco, Hanna Barbera, Los Simpson y Pokémon.
Lo mejor de todo es que este producto no murió en aquella década, pues en los 2000 se lanzaron un montón de modelos diferentes. Y ¡prepárate! Porque este 2020 regresan con Pac-man.
Yokos
Sabritas le exprimió todo el jugo que pudo a los Tazos. Inclusive lanzaron otro producto similar llamado Yokos. Estos también son piezas planas de plástico; sin embargo, tienen una forma peculiar que permite ensamblarlos entre sí.
Se convirtió en uno de los coleccionables de los 90 más recordados por las dos ediciones que tuvo. La primera estaba enfocada en Dragon Ball Z y se lanzó en 1997. La segunda tenía como protagonistas a los personajes de Ranma ½ y salió en 1998.
Camioncitos Bimbo
¿Hot Wheels, eres tú? Como en esos años coleccionábamos de todo, al osito Bimbo se le ocurrió una gran idea: lanzar camioncitos armables. Lo llamativo de estos eran que en conjunto mostraban la evolución de sus camiones repartidores de los 40 a los 90.
Y sí, nuestra hambre de pan incrementó con esta promoción. Si fuiste fan, entonces quizás también fuiste parte del regreso que tuvieron en 2019.
Pepsi Cards
En aquellos años hubo muchas series animadas basadas en cómics. Pepsi supo aprovechar el momento y lanzó uno de los coleccionables de los 90 más famosos: las Pepsi Cards.
Eran tarjetas en las que figuraban los superhéroes favoritos de todos. Primero se lanzó una especial de Marvel. Luego, se siguieron con los personajes de DC.
Cada una de ellas tenía una fabulosa ilustración del personaje. En la parte posterior, una breve reseña de su historia o el origen de sus poderes.
Álbumes de estampas
Sabemos que cada año estos artículos siguen saliendo a montones, pero eran toda una moda en aquella década. No todos eran de Panini, pero la marca se rifafa con los álbumes que lanzaba.
Que si el de Dragon Ball, que si el de Pokémon o el de Pocahontas o Mulán. No importaba cuál fuera porque el objetivo era el mismo: conseguir todas las estampas.
Y sí, luego ahí estabas en el recreo intercambiando con tus amigos o comprando sueltas en el mercado.
Magicromos
Con todo este auge de los álbumes de estampas, Bimbo no se quedó con los brazos cruzados. Lanzaron sus Magicromos y también se volvieron coleccionables de los 90. Consisten en una serie de tarjetas lenticulares que pareciera que tienen movimiento.
La edición más popular es la de Hércules, que se lanzó junto a un producto limitado llamado Olimpos. En total eran 27 tarjetas que podías juntar en un álbum. Pero esto no paró ahí, ya que Bimbo aprovechó y también lanzó una colección de Magicromos de la NFL.
Hielocos
Otro de los famosos coleccionables de los 90 fueron los Hielocos. Llegaron a México en 1997 de la mano de Coca-Cola y fueron una sensación.
Estaban inspirados en el juego de tabas de la Antigua Grecia, pero la neta es que nunca supimos ese dato de chamacos. Eran figuras de plástico transparente con nombres y personalidades. Tenían colores diferentes y algunos hasta brillaban en la oscuridad.
En total fueron cuatro series conformadas por 60 hielocos diferentes. Las ediciones lanzadas fueron: los originales, los que brillaban en la oscuridad, los aliens y hasta unos futboleros.
Promocionales navideños
No importa si lo iniciaste tú o tu mamá, pero otro de los coleccionables de los 90 que no podía faltar eran los promocionales navideños de Coca-Cola.
Y es que el tren que lanzaron era muy hermoso, ¡porque corría de verdad! Además, traía al clásico oso polar, una foca, un reno, y más.
Pero eso no fue suficiente, ya que la marca también lanzó una villa navideña conformada por varios escenarios. Tenías que juntar la estación del tren, el ayuntamiento, la dulcería y otros.
¿Cuántos de estos clásicos coleccionables de los noventa tuviste en la infancia?