Aceptémoslo, hagamos lo que hagamos, en algún momento nos tocará (o ya nos tocó) convivir con una persona que no lleva cubrebocas en la nueva normalidad, a pesar de estar en un espacio público. Las autoridades capitalinas ordenaron el uso de estas mascarillas desde el pasado 26 de abril. Sin embargo, aún hay personas que salen sin protección, pese a que estamos en medio de la reapertura de actividades y lejos de que concluya la pandemia
Hasta este 8 de julio, el Gobierno de la CDMX tiene registrados 53 mil 423 casos de covid-19, de los cuales 3 mil 951 son activos, y 7 mil 191 defunciones ocasionadas por esa enfermedad.
Buenas noches, les comparto el informe diario de la situación de la Ciudad frente al Covid-19.https://t.co/NqUAwTPxEj#ProtégeteYProtegeALosDemás pic.twitter.com/Q9EZ9woyAG
— Claudia Sheinbaum (@Claudiashein) July 8, 2020
A pesar de esos números, se puede observar a gente que no cumple con el uso de cubrebocas en la nueva normalidad.
“Es un invento del gobierno. A mí sinceramente me vale madres el virus (…) Si me muero ya ni modo. Yo ya viví”, dice Roberto Ramos, de 67 años, quien todos los días sale a trabajar sin cubrebocas.
“Si el presidente sale en sus mañaneras sin cubrebocas, ¿por qué nosotros deberíamos obedecer?”, cuestiona Alberto Noriega, un comerciante en el Centro Histórico, quien piensa que su juventud lo hace inmune a covid-19. “Esto sólo le da a los viejitos y enfermos. Yo estoy bien sano. Ahora que no vine a trabajar me la pasé haciendo ejercicio y alimentándome bien”, afirma el joven de 25 años de edad.
A pesar de que dos de sus familiares fallecieron debido al coronavirus, Gerardo Salinas tiene que convivir con quienes aún no optan por el uso de cubrebocas en la nueva normalidad.
La falta de pasajeros durante la pandemia ha obligado a que Gerardo tenga que trasladar a gente que no porta cubrebocas en su taxi, por lo que ha implementado medidas sanitarias especiales, como desinfectar los asientos de su auto con un desinfectante en spray. “La gente, además de no traer cubrebocas, tose o estornuda y rara vez desinfectan. Es desgastante tener que confrontarlos para pedirles que obedezcan”, dice.
El pasado 5 de junio, el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, llamó a los gobiernos a “alentar a la ciudadanía a portar mascarilla cuando hay una transmisión generalizada (del coronavirus) y es difícil establecer un distanciamiento social, como sucede en el transporte público, en tiendas o en otros lugares concurridos o confinados”.
El virólogo Samuel García Soberanes considera que no usar cubrebocas en la nueva normalidad es muy peligroso. “En la ciudad ya se reabrieron muchos establecimientos en los que se pueden observar a personas sin protección. Esto es preocupante para quienes se cuidaron toda la cuarentena y están volviendo a trabajar”, dice.
El infectólogo Joel Rosas Hernández explica que si la gente no cumple con el uso de cubrebocas en la nueva normalidad, las posibilidades de contagiarse aumentarán considerablemente y coincide con el doctor García en señalar que si seguimos saliendo sin cubrebocas, la pandemia nunca tendrá fin y, al contrario, la situación podría agravarse.
¿Qué puedes hacer?
Si sales a trabajar, al súper o simplemente tienes que convivir con personas que no usan tapabocas, lo primero es evitar cualquier confrontación. Recuerda, se trata de evitar problemas
Además, las autoridades sanitarias y especialistas en epidemiología, virología e infectología recomiendan:
- Mantener más de metro y medio de distancia con esa persona.
- Evitar el diálogo directo.
- No cuestionar las razones por las que no usan cubrebocas u otros equipos de protección, ya que puede haber reacciones violentas.
- Nunca quitarse el cubrebocas al momento de hablar.
- Evitar abordar unidades de transporte público o entrar a lugares en los que hay gente que no tiene el cubrebocas puesto.
- Desinfectar cualquier objeto recibido por alguna persona sin cubrebocas o careta. La desinfección puede ser con un trapo humedecido con agua y color, agua y jabón, o con alcohol.
- Utilizar gel antibacterial antes y después de entrar en contacto con alguna persona que no porte equipo de protección. El gel antibacterial también puede servir para desinfectar superficies y objetos en caso de no tener los líquidos mencionados en el punto anterior.
- Llevar cubrebocas de más, si es posible, para regalarlos a quienes no usen, principalmente a personas en situación de calle.
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