Cientos de árboles derribados y otros más marcados para su presunta tala es parte del daño masivo al Parque Nacional Desierto de los Leones.

Una investigación de Reforma documentó como es que cientos de ejemplares antiguos y jóvenes fueron lastimados, cortados y luego pintados con aerosol, esto en el área conocida como Cruz Blanca.

Invasores de un asentamiento regular aledaño señalaron al diario que las letras “LR” aparecieron apenas hace unos días en algunos árboles, además de que también hay espacio cercados con alambres de púas, esto con el fin de hacerlo un predio particular.

“Los han dañado ya en su corteza y se está queriendo desarrollar algún tipo de proyecto fuera de la ley, al parecer por un vecino de la comunidad de Acopilco, según nos informan”, dijo Patricio del Valle, abogado y coordinador del Comité Ciudadano de Lomas de Santa Fe.

Entre los árboles de esta zona protegida se edificó una colonia de unas 100 viviendas de cartón y tabique, a pesar de que este espacio no cuenta con uso de suelo habitacional.

Ciclistas señalaron a Reforma que son los mismos ejidatarios quienes se quieren apropiar de las tierras para construir un desarrollo habitacional, mientras que otros hablan simplemente de talar los árboles.

Ante este conflicto, esta zona se ha vuelto inaccesible para los paseantes, quienes antes la recorrían ya sea a pie o en bicicleta y ahora, simplemente la evitan.

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Presunta tala irregular en el Parque Nacional Desierto de los Leones