La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) eliminó el delito de aborto del Código Penal Federal, lo que quiere decir que queda despenalizado en todo México.
La Primera Sala de la SCJN declaró inconstitucional penalizar el aborto en el Código Penal Federal por violar los derechos humanos de las mujeres y personas con capacidad de gestar.
En septiembre de 2021, la Suprema Corte declaró inconstitucional la prohibición absoluta del aborto en los códigos penales de los estados.
El pasado 30 de agosto, la SCJN aprobó despenalizar el aborto en Aguascalientes, al concluir que sin importar la etapa de embarazo y “con el consentimiento de la mujer o persona gestante”, este tipo de sanciones son inconstitucionales y su aplicación constituye un delito.
“Dicha medida representa un obstáculo para el acceso efectivo y pronto que en materia de derecho a la salud debe brindarse a las mujeres y personas gestantes”, señaló la SCJN.
Con Aguascalientes, suman 12 de 32 los estados que han despenalizado el aborto. La Ciudad de México fue la primera jurisdicción latinoamericana en autorizarlo en 2007.
El fallo de este miércoles de la SCJN se derivó de una petición del Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE).
“Todas las mujeres y personas con capacidad de gestar podrán acceder a abortos en instituciones federales de salud”, festejó GIRE en un comunicado.
Aborto, una de las principales causas de muerte materna
En México, el aborto representa una de las principales causas de morbilidad y mortalidad materna sin cambios sustanciales en las últimas décadas, a excepción de la Ciudad de México desde 2007. El aborto se encuentra dentro de las primeras cinco causas de muerte materna. Las complicaciones y muertes por aborto se consideran evitables, porque no debieron suceder o pudieron ser prevenidas con el uso de la tecnología médica existente.
De acuerdo con el Informe Semanal de Notificación Inmediata de Muerte Materna, de la Secretaría de Salud, con corte al 8 de agosto de 2023, en lo que va del año se registraron 321 defunciones maternas, es decir, 77 menos con respecto al mismo periodo de 2022, cuando se registraron 398 defunciones. Al cierre de 2022 se registró la cifra más baja de defunciones maternas en el histórico del país. Las principales causas de defunción son directas y corresponden a hemorragia obstétrica, enfermedad hipertensiva y aborto.
A nivel mundial, la OMS estima que el 13% de las muertes maternas son derivadas de la práctica insegura del aborto. Se calcula que en el mundo se practican cerca de 19 millones de abortos inseguros o peligrosos y el 97% de ellos se realizan en países en vías de desarrollo.
De acuerdo con la Secretaría de Salud, “la evidencia epidemiológica muestra que los abortos inseguros generan morbilidad materna extremadamente grave, complicaciones, eventos adversos y muertes evitables con un alto costo para las personas, sus familias y los sistemas de salud, y que las consecuencias no mortales de un aborto complicado afectan seriamente la salud y la calidad de vida de las mujeres y personas con capacidad de gestar, incluidas niñas y adolescentes”.
En datos fríos que se reflejan en lo económico, y al reflexionar sobre por qué un Estado debe ofrecer el aborto legal, seguro y gratuito, se obtiene que a los sistemas de salud les sale más barato ofrecer clínicas para la interrupción legal del embarazo (ILE) que lidiar con las posibles complicaciones derivadas de hacerlo en clandestinidad.
A nivel mundial, se estima que el costo anual del tratamiento de las complicaciones por aborto practicado en condiciones inseguras es de 533 millones de dólares. El impacto del aborto inseguro o peligroso sería fácilmente prevenible si se implementaran leyes permisivas y servicios de salud accesibles, con personal capacitado y disponibilidad de los insumos adecuados, con lo que se ahorraría una gran proporción de los costos derivados de las complicaciones por abortos practicados en condiciones de inseguridad.
