¡Quién dijo miedo! Así entraron mujeres policías a panteón de CDMX para detener a hombre que exhumó tumba

Dos mujeres policías de CDMX entraron a un panteón de Iztapalapa para detener a un hombre que intentaba robar huesos humanos.

En la CDMX coexiste una amplia diversidad de creencias religiosas. Entre sus habitantes se encuentran católicos, cristianos, mormones, judíos, devotos de la Santa Muerte y santeros.

Es sabido que, entre las prácticas realizadas por los santeros, se utilizan osamentas en rituales que buscan establecer un vínculo con sus deidades.

Uno de estos rituales es el “rayamiento”, una ceremonia de iniciación en la que la persona, supuestamente, hace un pacto con un espíritu. Durante el ritual, se realizan pequeñas incisiones en diversas partes del cuerpo, donde se colocan astillas de huesos humanos y otros objetos que, según sus creencias, brindan protección contra cualquier negatividad espiritual.

Robo de huesos humanos se castiga con hasta 3 años de cárcel

De acuerdo con santeros que prefieren mantenerse en el anonimato, los costos de estos rituales oscilan entre los 500 y los 20 mil pesos, dependiendo del trabajo.

En la capital del país está penado el robo de cadáveres en los panteones. En junio de 2022, el Congreso de la CDMX aumentó las penas por este delito, modificando los artículos 207 y 208 del Código Penal. La sanción ahora es de 3 meses a 3 años de prisión. Asimismo, se determinó que las personas que mutilen cuerpos o realicen actos de necrofilia podrían enfrentar hasta 10 años de cárcel.

En los últimos años, este tipo de robos se ha vuelto más común en la CDMX. El pasado 31 de agosto, mientras las policías auxiliares Rosa Aguirre y Ana Xóchitl realizaban un patrullaje de rutina cerca del panteón civil San Nicolás Tolentino, en la alcaldía Iztapalapa, recibieron una llamada reportando que un hombre estaba exhumando restos óseos de una tumba.

En Iztapalapa hay 10 panteones, y San Nicolás Tolentino es el segundo más grande de la CDMX, con 113 hectáreas.

En menos de cinco minutos, las uniformadas llegaron al lugar y detuvieron a un hombre de 60 años, quien portaba un bote de plástico blanco con varios restos óseos.

Mujeres policías, sin miedo a los muertos… ni a los vivos

La oficial Ana, de 31 años y madre de dos hijos, encaró al sujeto, quien decidió reservarse su derecho a declarar. Para ella, acudir a un llamado en el panteón no es raro, ya que realiza su trabajo con vocación y buena actitud. Sus dos pequeños están orgullosos de su madre por su dedicación y entrega.

Para la agente Rosa, de 36 años y madre de cuatro hijos, la detención fue como cualquier otra. Esta pareja de mujeres policías lleva un año trabajando juntas y no se deja intimidar en el cumplimiento de su labor.

A pesar del misticismo que rodea a un panteón, las policías entraron sin pensar en los misterios del más allá, evitando que los restos de una persona fueran utilizados en algún ritual.

Iba a cobrar 5 mil pesos por los huesos robados del panteón

Según las primeras investigaciones de la Fiscalía de la CDMX, el sujeto identificado como Agustín “N” recibiría 5 mil pesos por entregar los restos óseos a personas vinculadas con la santería.

Cambio y fuera.

Así persiguió policía a conductor que atropelló a oficial: “Es lamentable que te agredan sin razón”

Chilango Menú Footer Chilango recomienda