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Policías de CDMX arriesgan su vida para evitar suicidio: "En el momento no lo piensas"  

Policías de la Ciudad de México logran evitar que un hombre de 42 años atentara contra su vida en calles de la alcaldía Magdalena Contreras.

Un segundo marca la diferencia entre una tragedia y un acto de heroísmo. En la calle San Bernabé, en la alcaldía Magdalena Contreras de la CDMX, dos policías no dudaron en actuar para evitar que un hombre de 42 años atentara contra su vida.

El pasado 11 de septiembre, los ojos que vigilan la capital, el Centro de Control y Comando C2, informaron al policía Cristian Pérez sobre un hombre que intentaba lanzarse desde la azotea de su casa.

Al llegar al lugar, el uniformado escuchó que el hombre decía que quería matarse y que su vida ya no tenía sentido. Sin pensarlo dos veces, entró al domicilio, subió hasta donde se encontraba el hombre e intentó convencerlo de no quitarse la vida.

Se complica el rescate: el hombre se arroja a cables de alta tensión

De acuerdo con los vecinos, el hombre llegó corriendo a su hogar, gritando que un grupo de personas lo perseguía y querían golpearlo.

Por medio de su radio, el agente Pérez solicitó ayuda a su superior, el policía Héctor López, para evitar una tragedia.

Entre los dos intentaron tranquilizar al hombre, pero este saltó hacia los cables de alta tensión, lo que complicó su rescate. Sin embargo, los uniformados no desistieron en su labor de salvar una vida y le dieron la confianza para que les contara sus problemas y pudieran ayudarlo.

Policías de CDMX arriesgan su vida para evitar un suicidio

Con la ayuda de un camión, una marquesina y una escalera, los policías hicieron hasta lo imposible para salvar la vida del hombre, incluso poniendo en riesgo la suya.

Cuando finalmente lograron asegurarlo, él le comentó al oficial Héctor que tenía problemas y que ya no quería seguir viviendo.

Hasta el lugar llegó un hombre de 65 años, quien se identificó como el padre del hombre de 42. Los servicios de emergencia atendieron al hombre por una crisis nerviosa, lo hidrataron y se retiró con su familiar.

Los uniformados son conscientes de que en su profesión desempeñan múltiples roles, desde paramédicos y bomberos hasta psicólogos, para cumplir con su misión.

Policías de CDMX: padres entregados a su familia

Para Héctor, de 32 años, quien tiene dos hijos gemelos de 4 años, su trabajo es muy importante, pero reconoce que su familia siempre vive con la preocupación de que algo le suceda mientras cumple con su deber.

“Nuestras familias se sienten orgullosas de nosotros, nos felicitan y también se preocupan. Nos dicen: ‘Oye, ¿y si te hubieras caído tú también?’. En el momento no lo piensas, solo piensas en hacer tu trabajo de la mejor manera y en salvar una vida”.

Cristian, de 30 años y con dos hijos, quienes lo ven como un héroe, también sabe que su familia se preocupa porque cada día arriesga su vida. Asegura que ser policía ha sido una de las mejores decisiones de su vida.

“Es algo bonito, algo especial. Desde que uno decide entrar en este ámbito, el simple hecho de ponerse el uniforme ya te hace sentir parte de otra familia”.

Su única petición es que la ciudadanía los apoye y respete para poder hacer su trabajo: “No toda la policía es mala, hay policías que hacemos el trabajo bien y con profesionalismo”, puntualizó Cristian.


Si necesitas ayuda, no estás solo, llama a la línea de la vida: 01 800 911 2000

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