El ‘Superman’ de la Policía de CDMX: así salvó a un taxista de la muerte

Un policía de CDMX llegó a tiempo a un atraco para salvar a un taxista, quien fue atacado con un cuchillo por un ladrón. Esta es la historia de Cambio y Fuera.

Los taxistas, o ruleteros como también se les dice en la CDMX, son tanto queridos como odiados en esta caótica metrópoli, donde 15 minutos pueden convertir un trayecto de 40 minutos en dos horas. Sin embargo, ellos se lo toman con calma, porque este trabajo les permite llevar comida a sus hogares.

Recientemente, la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la CDMX dio a conocer imágenes de un hombre que atacó a dos taxistas con un arma punzocortante en la alcaldía Iztapalapa.

El primer robo fue denunciado a través de uno de los postes de auxilio ubicados en varias vialidades de la ciudad. En esta ocasión, en la esquina de las calles Colorines y Eje 3 Oriente, en la colonia Valle del Sur, en la alcaldía Iztapalapa, de CDMX.

“Conduzco un taxi, pero se subió un tipo, me dio un cuchillazo y me robó. Me quitó el dinero y el celular”, relató la víctima.

Tras el reporte, los oficiales del Centro de Comando y Control (C2) Oriente rastrearon al sospechoso, quien fue identificado mientras cometía otro asalto a otro taxista, esta vez en la calle Ganaderos, en la misma colonia.

En las imágenes captadas por las cámaras de seguridad en CDMX, se observa cómo el agresor se colgó de la ventanilla del vehículo hasta romperla. Posteriormente, hirió al conductor en repetidas ocasiones en las piernas con un cuchillo e intentó robarle sus pertenencias.

Contienen a ladrón armado en acción como de película

Mientras ocurría el atraco, el oficial Edgar Jovanni Pérez, quien patrullaba la zona, fue alertado por radio del incidente y llegó al lugar en cuestión de segundos.

El sospechoso, que vestía una sudadera azul, intentó atacarlo al ver la llegada del uniformado.

El policía de CDMX, al percibir que su integridad estaba en riesgo, desenfundó su arma. A pesar de esto, el agresor, fuera de sí, no desistió en su intento de lesionarlo. Segundos después, el taxista descendió de su vehículo y golpeó al hombre en la cabeza para distraerlo, momento que el oficial aprovechó para someter al asaltante.

“Cuando voltea y me ve, la persona estaba muy agresiva y se vino contra mí. Traté de calmarlo, ya que yo venía solo, mientras esperaba el apoyo de mis compañeros”, explicó el oficial Pérez.

Inmediatamente, otra patrulla llegó con dos policías más, quienes lograron capturar al responsable de herir a dos hombres que solo estaban trabajando.

Vecinos intentan ‘salvar’ a ladrón

Cuando el delincuente ya se encontraba dentro de la patrulla, un grupo de personas intentó evitar la detención, lo que provocó un enfrentamiento con los uniformados. Uno de los individuos que inició la turba fue detenido por agredir a un policía.

Al lugar llegaron más uniformados para evitar que el operativo se saliera de control.

Para el oficial Pérez, es importante que la ciudadanía confíe en ellos.

“En ese momento, cuando ocurrieron los hechos, piensas en tu familia, en tus hijos, y dices: ‘Híjole, ojalá esta persona no me lesione’, porque, al final de cuentas, estás exponiendo tu vida por otras personas, por gente que a veces ni conoces, pero arriesgas tu vida”, compartió.

Reconoce que es parte de su trabajo y se siente muy orgulloso de pertenecer a la Policía de la capital.

“Si yo no hubiera llegado en el momento, no sé qué otra cosa hubiera pasado, probablemente lo pica de más, me siento contento por que salve la vida de una persona que estaba en riesgo, ya estaba en peligro su vida”, dijo.

Delincuente estuvo en la cárcel en 1997

Los dos detenidos fueron trasladados al Ministerio Público para deslindar responsabilidades.

Al hombre que atacó a los taxistas, se le decomisó un celular, 700 pesos y un cuchillo de sierra. Además, se identificó que ya contaba con un ingreso a la cárcel en 1997 por ingerir bebidas alcohólicas en la vía pública en CDMX.

Si el oficial Pérez se pudiera comparar con un superhéroe sería Superman: “Como las películas de antes”.

El agente de 35 años, quien tiene 3 hijos, afirma que seguirá trabajando con el compromiso que lo caracteriza.

Cambio y fuera.

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