Tu dinero está a un clic de los ladrones si tu contraseña tiene 1234, si guardas los datos de tu tarjeta en la app de compras o si tienes el mínimo nivel de seguridad en tu banca móvil.

Recientemente la actriz Verónica Bravo relató que hace unas semanas le robaron su teléfono y los delincuentes lograron entrar a la app de su banco y sacaron todo su dinero.

¿Entonces la solución es no tener la app del banco? La verdad es que poder hacer transacciones con solo unos clics desde el cel nos ahorra tiempo, pero si no ponemos suficientes candados para acceder a ella podemos acabar sin dinero.

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Víctor Hernández, Senior security consultant de la empresa A3sec, explica que debemos poner “topes” a los ladrones para que no les sea tan fácil entrar a nuestras cuentas y que nos de tiempo, si somos víctimas de un robo, a denunciar y cancelar todo.

En el caso de las app en el celular, Víctor recomienda activar todos los candados de seguridad que tengan: contraseña alfanumérica, huella, face ID. 

“Hay que buscar robustecer todos los sistemas de las aplicaciones, pasa que por flojera o por o por desidia el banco nos dice ‘activa la autenticación de dos factores es decir, huella digital y tu alfanumérico’, inclusive hay una que hasta te pide también el Face ID no, pero no lo hacemos porque decimos ‘ah, se nos va a olvidar, con esto es suficiente”, señala el experto.

¿Compras desde tu cel?

Si también te gusta comprar a través de apps o páginas desde tu celular, aguas, porque si llegan a robarte el celular podrían hacer pedidos que tu no quieres.

Víctor advierte que hay que evitar guardar todo tipo de contraseñas de ecommerce, tiendas departamentales dentro de estos servidores. Quita la tarjeta, aunque te cueste más trabajo y la tengas que poner cada vez que harás una compra.

Si puedes activar la autenticación de dos pasos antes de aprobar la transacción, hazlo. Algunas te mandan un mensaje de texto o un correo electrónico para que autorices antes de hacer la compra.

¿Tu contraseña es segura?

Si pones la misma contraseña a todo para que no se te olvide o tiene xxx1234, tienes un problema de seguridad.

La primera recomendación es no usar la misma para todo: correo, redes, banco, apps de compras.

Debe tener números, letras (mayúsculas y minúsculas) y caracteres especiales como guiones, asteriscos o signos de suma y al menos 12 caracteres.

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“Si tu contraseña es de 4 números es más fácil deletrearla porque a veces los programas para hackear contraseñas juegan como la ruleta de donde vaya activando (el número) se queda y así va jugando” hasta adivinar todos los números.

Poner en tu contraseña algo que te gusta mucho, como el nombre de tu mascota, de tu equipo favorito o de tus hijos tampoco es seguro.

Si esta información está en tus redes, los hackers pueden usarla para tratar de adivinar tus accesos.

Por eso tu contraseña debe ser algo que no tenga relación con tu vida cotidiana.

La computadora no es más segura

¿Guardas tus contraseñas de todo en tu sesión en la computadora? No falla que el mismo navegador te pregunta si quieres guardar la contraseña y usuario del sitio al que acabas de acceder y dices que sí para no tener que poner todos los datos cuando vuelvas a ingresar.

Esto tampoco es seguro porque si roban tu computadora podrán entrar a todo lo que usas con solo ingresar a la página. 

“Hay que concientizar a todos de que aunque nos cueste un poquito más de trabajo poner diferente tipo de contraseñas y evitar el que se nos olvide, busca indicios que te ayuden a generar esa contraseña”, dice el consultor de A3sec.

Otra recomendación es activar las notificaciones de los servicios que usamos y redes sociales – como los intentos de ingresar – para que no solamente nos lleguen a nuestro celular, sino al correo, en caso de que nos roben el teléfono.

“Así puedo acceder desde otra cuenta y bloquear inmediatamente la aplicación o dar de baja todo todo mi sistema digital”.

Víctor Hernández recomienda: “poner un literal un tope para nuestra seguridad y complicarle en la vida al atacante para que me dé tiempo a mí de bajar o cambiar o reportar a la entidad de financiera a la telefonía móvil para que dé de baja mi teléfono e inclusive notificarle a todos mi esfera social”.

También debemos ser más desconfiados y curiosos pensar dos veces y hacer una revalidación si nos ofrecen o nos piden ingresar datos para algo.