Smability: por una mejor calidad del aire en la CDMX
Es imposible medir las partículas contaminantes que se concentran en las calles, pero sí sabemos que en la CDMX estamos expuestos a mala calidad del aire.
Por: Colaborador
¿Cómo podemos saber qué tipo de aire consumimos diario en nuestros trayectos cotidianos? Hasta ahora es imposible medir las partículas contaminantes que se concentran en las calles. Lo que sí sabemos es que en la Ciudad de México estamos expuestos a mala calidad del aire.
¿Es normal que la calidad del aire sea mala?
Es común en las grandes ciudades: de acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud, más de 5.5 millones de personas mueren anualmente en el mundo por el aire sucio, y más del 80% de los habitantes de zonas urbanas respiran una cantidad de contaminantes que excede los límites recomendados.
Para responder a estos problemas, Smability –una startup mexicana fundada en 2016 por Horacio y Octavio Jiménez y Hugo Cruz– trabaja en dos sensores, uno fijo y otro móvil, que permitirán a los usuarios conocer la calidad del aire que respiran en tiempo real.
Su iniciativa, aún en fase piloto, es impulsada por el Laboratorio para la Ciudad y realizada en colaboración con la Secretaría de Medio Ambiente (Sedema), y lograría tres objetivos: proporcionar datos de calidad del aire a nivel peatonal, mapear puntos y trayectos gracias a un GPS integrado, y lograr que la información sea accesible a través de visualizaciones.
Smability apuesta por mejorar la calidad del aire
«A diferencia de una estación fija (de Sedema) que funciona como un indicador porque está siempre en el mismo punto, estos sensores son de hiperresolución, es decir, indican cuáles son las condiciones de la zona en la que estás respirando –explica Horacio Jiménez–. Nuestra meta es que la tecnología se humanice».
¿Cómo funciona el modelo piloto? El sensor es pequeño (mide 10 centímetros de largo y cinco de ancho) y tiene una ranura por la que entra el aire; al interior hay una especie de láser que cuenta las partículas PM 2.5. Una vez que recolecta la información, esta se envía en tiempo real a una plataforma y se hace el postanálisis que termina con las visualizaciones para que se conozca la calidad del aire.