Desde el inició de la emergencia sanitaria, el personal de salud ha enfrentado un doble estrés: en su trabajo, los casos de personas con COVID-19 se han incrementado en las últimas semanas, mientras que en las calles se han registrado al menos 21 agresiones a médicos y enfermeras.

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“Les quiero hacer un llamado… hacer un extensivo llamado de respeto de parar la agresión. En este caso duele, duele hablar de esto, duele hablar de lo que le pasa a tu gente, duele hablar de todos los trabajadores de la salud que también somos personas, también tenemos familias y estamos dejando muchas cosas. Estamos dejando nuestras casas, nuestras familias, estamos dejando nuestra vida en las unidades hospitalarias”, dijo, al borde del llanto, la Jefa Fabiana.

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El pasado 20 de marzo, durante la conferencia vespertina sobre el avance de la crisis por COVID-19, Fabiana Maribel Zepeda Arias, jefa de la División de Programas de Enfermería del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), llamó a la población a parar las agresiones a médicos y enfermeras.

“Nosotros podemos salvar sus vidas, ayúdennos por favor a cuidarnos y para eso necesitamos que ustedes nos cuiden… necesitamos la mayor solidaridad en estos momentos”, dijo la jefa Fabiana, quien reconoció que las agresiones han golpeado fuerte al gremio “porque ahora tenemos que lidiar con otras cosas… los invitamos a respetarnos”.

Once días antes de que las palabras de la Jefa Fabiana conmovieran al país, Josué, un enfermero, y su esposa Maribel, quienes pidieron proteger su identidad, decidieron prepararse para la crisis sanitaria.

Compraron productos no peredecederos e instalaron una estación sanitizadora para que, al regresar a casa, puedan limpiarse. Siempre han mantenido fuertes hábitos de higiene; sin embargo, decidieron reforzarlos debido a que Josué está en contacto continuo con personas diagnosticadas con COVID.19.

Además, Josue ha cambiado su rutina: procura limitar al máximo todo tipo de contacto con familiares y amigos cercanos y pone especial atención en todos los procedimientos de limpieza y prevención.

A través de redes sociales, Josué ha recibido muestras de apoyo y agradecimiento por su labor atendiendo a pacientes; sin embargo, él también ha sido víctima de agresiones por su labor. 

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“Es estresante vivir con la paranoia de que cualquier persona pueda golpearte o algo peor”, explica en entrevista conChilango,días después de que fue atacado a golpes por familiares de un paciente. “Es entendible todo el estrés y la incertidumbre que viven los familiares de personas que tienen COVID-19, pero nada justifica los golpes”, señala.

Con el aumento de personas con COVID-19 en México, también ascendieron las agresiones a médicos y enfermeras. A algunos los han bañado con cloro o los han bajado del transporte público, a otros los han golpeado y hasta les han escupido, mientras les gritan que son un foco de infección.

El 17 de abril pasado, una enfermera relató en sus redes sociales que fue agredida por un par de personas después de que estacionó su coche frente a una casa particular en Lindavista, al norte de la CDMX. Los agresores acusaban a la enfermera de llevarles el foco de infección hasta la puerta de su hogar y luego la golpearon, indica un reporte del diario Excélsior.

En respuesta, la enfermera agredida interpuso una denuncia en contra de sus atacantes. Derivado de la agresión, ahora ella tiene moretones y rasguños en la cara, así como dos dedos vendados, pues afirma que uno de sus atacantes hasta la mordió. 

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El Seguro Social ha contabilizado hasta 21 agresiones a médicos y enfermeras, hasta el 20 de abril pasado, cuando la Jefa Fabiana llamó a la población a parar los ataques. Las agresiones han currido en 12 estados del país, incluyendo la Ciudad de México, Puebla, Morelos y Chihuahua. 

Tras el mensaje de la Jefa Fabiana, dos mujeres fueron detenidas en Querétaro, luego de que intentarón agredir a una enfermera que estaba en una parada de transporte público, acusandola de estar contagiada de COVID-19. Las dos mujeres fueron detenidas y acusadas del delito de discriminación. 

“Seamos amables”: personal médico pide respeto, tras agresiones a médicos y enfermeras

Ante los ataques registrados contra personal de salud, las autoridades locales y federales han aplicado distintas medidas, que van desde transporte exclusivo hasta el reforzamiento de la seguridad en hospitales e instalaciones de salud.

“Nosotros no somos portadores (de COVID-19) en la calle ni vamos a contagiar a nadie. Al contrario: los estamos cuidando. También somos personas, tenemos familia y estamos dejando a nuestras casas, familias y nuestra vida en las unidades hospitalarias”, explicó la Jefa Fabiana.

En tanto Josue y su esposa solo piden que la población sea más empática y amables, no solo con personal médico sino con todas las personas, pues son tiempos difíciles.

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