Es licenciado en Criminalística, agente de Tránsito en la Ciudad de México y su sueño es competir en los Juegos Paralímpicos de Tokio 2021, representando a México, pero es probable que lo conozcas porque es el policía que ganó el reto de hacer lagartijas en el Zócalo.

El oficial Pablo Ramírez Lemus se hizo famoso por derrotar a un entrenador, pero en realidad se trata de un atleta con experiencia internacional, cuyo amor por el deporte comenzó cuando apenas era un niño y practicaba ciclismo y senderismo.

Tras sufrir un accidente en 2012, en el que perdió una pierna, el agente Pablo comenzó a practicar remo, disciplina que lo ha llevado a varias competencias internacionales. Incluso en 2018, junto a Ángeles Britany Gutiérrez, obtuvo medalla de bronce en los 12 Juegos Internacionales de Remo Paralímpico, realizado en Italia. 

“Actualmente estoy en el Club de Marina, representando el bote paralímpico con Miguel Carpio. Ya tuvimos participación en dos Mundiales, en la categoría de bote 4 mixto, bajo la supervisión de la entrenadora Alejandra Menzi y ahora vamos a buscar nuestro pase a Tokio 2021. Tenemos una prueba de tiempo por parte de la Conade (Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte), que nos va a ir muy bien, y vamos a participar en la prueba clasificatoria”, asegura el policía capitalino, en entrevista con Chilango. 

Con el afán de calificar a los Juegos Paralímpicos, el oficial Pablo Ramírez entrena todos los días, siguiendo las medidas sanitarias debido a la pandemia por covid-19. “La Federación Mexicana de Remo me apoyó y me prestó un simulador para que pudiera seguir entrenando en casa”, dice.

Además de querer competir en Tokio 2021, el ganador del reto de hacer lagartijas tiene otra misión: “Romper el vínculo en el que catalogan a los policías como malos oficiales y nos dicen palabras negativas. Hay que romper este tabú, debemos apoyarnos tanto el policía al ciudadano, como el ciudadano al policía”, dice.

Además, con apoyo de la SSC, quiere fomentar actividades deportivas dentro de la dependencia. Personalmente le gustaría que este reto de hacer lagartijas fuera el comienzo de algo más grande. “Me gustaría que no quedara en una acción que pasó en un reto sino que se le diera continuidad a proyectos deportivos, regresar con todo después de la pandemia y reforzar el sistema inmunológico de la población. Que se diga que en México somos fuertes, somos unidos y que podemos hacer el cambio”, afirma.

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Cómo inició el reto de hacer lagartijas en el Zócalo

“Salió un bato con complexión musculosa y dije: ‘ay, Dios mío, va a estar fuerte la competencia’”. El pasado viernes 3 de julio, el oficial de tránsito Pablo Ramírez sacó a relucir su preparación física, cuando, en medio de una protesta para exigir que ya se permita la reapertura de gimnasios, derrotó a uno de los manifestantes, quien retó a los policías a ver quién aguantaba más. “A mí me gusta el deporte y me enganché”, afirma el funcionario de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC). 

Una, dos, tres… ambos hombres aguantaron dos minutos con este ejercicio, hasta que el instructor no pudo más y se rindió. Tras ponerse de pie, el entrenador no tuvo de otra más que aplaudirle a su rival, quien todavía se echó tres lagartijas más, para finalmente darle la mano a su adversario. 

“Me sentí muy alegre porque después vi el video y nos estaban retando. Generalizaron y dijeron cosas negativas de la policía y la verdad los hechos hablaron por sí solos y me sentí muy bien porque no gané yo, ganó la policía”, concluye. 

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