Busca lo que necesitas y ofrece lo que tengas: así es como funciona la plataforma Solidaridad UNAM, creada para ayudar a la población más vulnerable que se ha visto afectada por la contingencia de covid-19.
Mientras el semáforo de contagios y hospitalizaciones continúe en rojo, aún nos queda un laaargo camino por recorrer para domar a la pandemia; por eso, aún es necesaria la ayuda tanto para personas que han visto afectados sus ingresos, como para el personal médico y quienes luchan contra el virus.
El Centro de Ciencias de la Complejidad (C3) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) se rifó para crear un sitio web de intercambio solidario de servicios y productos.
Luego de visibilizar las dificultades que tendrían las personas más vulnerables para acceder a ciertos servicios, y de otras iniciativas de apoyo que surgieron, el coordinador general del Centro de Ciencias de la Complejidad (C3), Alejandro Frank, con apoyo de ocho investigadores del instituto, desarrollaron esta página que funciona desde el pasado 19 de mayo como una intermediaria entre voluntarios y solicitantes.
“El objetivo es que esta plataforma, que funciona a nivel nacional, sirva para ayudar a la gente vulnerable, a todos los que no puede salir de su casa o no tengan quien los apoye dentro de su hogar”, afirmó Marco Antonio Rosas Pulido, uno de los investigadores del C3 de la UNAM que participaron en el proyecto.
Una plataforma para tenderle la mano a los más necesitados
Al ingresar al sitio de Solidaridad UNAM encontrarás un catálogo de productos y servicios, separado en dos apartados: los que ofrecen y los que buscan. El listado tiene desde sanitizantes, comida enlatada, agua potable, cubrebocas, hospedajes temporales, repartidores que recogen despensas, medicamentos y hasta cursos en línea para menores.
Además, hay otra sección donde puedes buscar u ofrecer servicios que no aparezcan en los catálogos de la plataforma.
Ahora que si tienes chilanguitos aburridos en casa por la cuarentena, el sitio también ofrece opciones para que puedas entretenerlos un buen rato: “Para los niños que han estado encerrados por mucho tiempo buscamos que se puedan entretener con clases de dibujo, pintura, música, actualizaciones en materias de español o matemáticas. Afortunadamente hemos recibido varias iniciativas para donar cursos o clases para apoyar a los niños”, afirmó el también biólogo Rosas Pulido.
Aunque en un principio el proyecto se había enfocado en que los universitarios fueran los voluntarios, la respuesta un poco lenta de la población para ayudar, motivó a los investigadores del C3 a ampliar la convocatoria a nivel nacional para todos los que deseen tirar paro a quien lo necesite.
Hasta la fecha, la iniciativa cuenta con un registro de alrededor de 350 personas, de acuerdo con el biólogo Rosas Pulido, quien resalta a la Zona Metropolitana del Valle de México como la entidad con mayor participación, sin contar asociaciones o empresas, pues estas no pueden colaborar por ahora.
“Nos interesa mucho que la gente que se registre también ofrezca o pueda aportar algo de ayuda, incluso estamos viendo la posibilidad de integrar asociaciones civiles, como bancos de comida para tener productos que ofrecer, claro que ellas sólo serían donantes, no solicitarían ayuda”, detalló el investigador del C3 de la UNAM.
¿Ya publicaste tu oferta solidaria? Únete como Michelle y Ehcatl quienes solidariamente ofrecen clases gratuitas para menores de edad. #QuedateEnCasa pic.twitter.com/lf0ipQ6zyc
— Solidaridad UNAM (@solidaridadunam) June 8, 2020
¿Cómo funciona Solidaridad UNAM?
No importa si eres menor de edad o si vives fuera de la CDMX, ya que la plataforma está abierta al público en general y opera a nivel nacional.
Eso sí, lo indispensable para acceder al catálogo de productos y servicios es registrarte y llenar los campos obligatorios con tu nombre, fecha de nacimiento, género, correo electrónico y código postal, este último dato facilitará la conección entre quienes son voluntarios y quienes solicitan ayuda.
Ojo, los datos que proporciones no serán visibles para nadie, a menos que decidas ponerte en contacto con alguno de los que se encuentran en la plataforma, y aun así la comunicación tiene lugar afuera de la página, señaló Rosas Pulido.
“Algo que es muy importante es que metan su ubicación con código postal porque además de acceder a la ayuda más cercana a ti, se limita que se genere más desplazamiento dentro de ciudades y municipios”, señaló.
Sobre el funcionamiento de Solidaridad UNAM, el investigador del C3 explica que si alguien ofrece su ayuda, se publica dentro de alguna categoría que encaje y entonces el interesado pueda abrirla para ver los datos y ponerse en contacto.
¿Debo pagar por los productos y servicios que solicite? Al ser una plataforma de intercambio voluntario no se requiere pagar algún precio económico; sin embargo, el sitio web cuenta con un espacio libre de remuneración para aquellos que opten por algún intercambio de productos o cooperación voluntaria como forma de pago.
Con la experiencia recolectada desde hace tres semanas, el equipo de investigadores se encuentra trabajando en una segunda versión del sitio web para mejorar el apartado de repartidores voluntarios de transporte y bicicleta, pues aún hay poca participación.
Al hablar sobre la duración que tendrá el sitio, Rosas Pulido señaló que estará disponible el tiempo necesario para apoyar a la gente e incluso si es útil para otras situaciones tomarían en cuenta emplearlo por un periodo más largo.
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¡Que el apoyo no pare! Siempre podemos ayudar a alguien y siempre hay quien agradezca nuestra colaboración ¡Hagamos comunidad en SolidaridadUNAM! pic.twitter.com/I4JIWphWJN
— Solidaridad UNAM (@solidaridadunam) June 1, 2020