"También somos feministas": mujeres Policía de la CDMX
Las mujeres policía también luchan contra la violencia de género en el transporte, en la calle y en sus casas. Por esta razón, también son feministas.
Por: Andrés Rangel Garrido
Son el único grupo de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) conformado por mujeres policías en la CDMX: las Ateneas. Ellas resguardarán las manifestaciones de este 8 de marzo en contra de la violencia de género.
“No somos enemigas”, es el mensaje que envía Itzania Otero, directora de la Policía Metropolitana Femenil y del Grupo Atenea, quien tiene a su cargo más de 500 mujeres policía.
“Tenemos miedo, como mujeres policía tenemos miedo. Yo como directora soy responsable. Mi mayor preocupación son ellas (las mujeres policía), porque tenemos la orden de contener, dialogar y auxiliar. Por más fuerte que sea la agresión, no podemos responder”, explica Itzania.
En las marchas recientes contra la violencia de género en la Ciudad de México, como la del 25 de noviembre de 2019, un grupo de manifestantes encapuchadas agredieron físicamente a las mujeres policía quienes tenían la orden de resguardar diversos monumentos y edificios, como el Palacio de Bellas Artes.
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Las agresiones fueron contenidas con escudos de plástico y extintores. Aquella ocasión, ninguna manifestante y ninguna de las mujeres policía resultaron con heridas de gravedad.
En esta marcha del 8 de marzo de 2020, 2 mil mujeres policía, de diversas corporaciones, como Grupo Atenea, Tránsito, Preventiva, Bancaria Institucional y Auxiliar resguardarán la seguridad de las manifestantes, desde el Monumento a la Revolución hasta el Zócalo.
Iztania no descarta recibir ataques de grupos radicales durante esta marcha, sin embargo, está consciente del hartazgo por la violencia de género que se vive en el país, lo que hace esta tarea aún más díficil.
“Las mujeres policía estamos capacitadas en defensa personal, manejo de multitudes, instrucciones de manejo cerrado, formaciones militares y, principalmente, capacitación en perspectiva de género. Nuestro objetivo es resguardar la seguridad a través del diálogo”, explica Itzania.
Tan solo en la Ciudad de México se registraron71 feminicidios en 2019, de acuerdo con el documento deIncidencia Delictiva del Fuero Común 2019, del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
En ese mismo año en la CDMX, indica el mismo documento, se registraron 6 mil 507 delitos contra la Libertad y la Seguridad Sexual, de los cuales 4 mil 58 fueron por abuso sexual, 945 por acoso sexual, mil 163 por violación simple, 290 por violación equiparada, y 51 por otros delitos sexuales.
Ante esta ola de violencia, mujeres, madres de familia, así como diversos grupos feministas buscan una transformación cultural, social, política y económica, así como justicia para las víctimas de feminicidio.
Al igual que todas esas mujeres que saldrán a protestar este 8 de marzo, el Grupo Atenea de la SSC busca que haya igualdad de género en la policía, para acabar con el machismo que se vive en ella, confiesa Itzania.
“El mayor número de mujeres policía hemos sufrido algún tipo de acoso, intimidación, e inclusive agresión, en el transporte, en la calle, en la casa.
” Yo inicio mi movimiento feminista en mi agrupamiento, porque ahora todas debemos tener un movimiento feminista. Tengo 500 mujeres policía a mi cargo. Yo estoy con ellas todo el tiempo ayudando, preguntando y auxiliando. Yo siempre les digo: ‘Si vamos a salvaguardar a nuestras compañeras feministas, primero debemos empezar desde casa, saber qué está pasando con nosotras mismas, las mujeres policía, y resolver”, confiesa.
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Opinión de Colectivas Feministas
“Por lo que me ha tocado ver en las marchas, hay algunos elementos que hacen muy bien su trabajo, incluso podría decir que son hasta sororas, pero como todo, no todas las mujeres policía hacen su trabajo con perspectiva de género y derechos humanos. Habría que pasar una lupa para saber cómo están siendo preparadas para atender este tipo de manifestaciones”, explica Ana Elena Contreras, integrante de Aquelarre Feminista.
“Hay que hacer un llamado a las mujeres policías, entender que todas somos parte del sistema, hacer un llamado a su sororidad, tratando de manejar el uso de la fuerza de manera adecuada y correcta, porque muchas veces los contingentes no vamos armadas y también van menores de edad”, concluye Ana Elena.
Asimismo, Marcela, integrante del Frente Nacional para la Sororidad, explica que las mujeres policía “al tener el mandato de resguardar la seguridad de las manifestantes, obvio también tienen que cuidar los monumentos y eso las hace entrar en confrontación a veces”.
“No las veo para nada como enemigas, creo que son mujeres que atraviesan también por todas las problemáticas de género. Ellas hacen su trabajo. Sería más irresponsable del gobierno de la Ciudad no enviarlas o enviar hombres”, concluye.
Trabajo de mujeres policía en Grupo Atenea
El trabajo de las Ateneas va más allá de su labor de auxiliar en las marchas, ellas se encargan también de brindar apoyo en escuelas, operativos y otras acciones para resguardar la seguridad de los chilangos.
“Nos dedicamos a auxiliar en eventos masivos, bloqueos, acciones preventivas, operativos de seguridad, también en primarias, secundarias, jardines y parques, operativos como pasajero seguro, avenidas principales y conflictivas, así como asistir a la ciudadanía en diversas colonias, es un trabajo de acercamiento para generar confianza”, explica Itzania.
Las mujeres policía auxilian a las personas, buscando celulares, con ayuda médica o apagando el fuego para evitar heridos.
“Saliendo del contexto del uniforme, soy mujer. Y si tengo la capacidad de ayudarlas y sacarlas (a las mujeres policía) de sus situaciones de violencia en casa, para darles las herramientas y que hagan una vida sin esa violencia, lo haré siempre que pueda. Ese es mi aporte feminista, como mujer. Porque cómo voy a proteger a la ciudadanía si primero no protejo a mis elementos”.
Finalmente, Itzania concluye: “Necesitamos unirnos, no desconocernos entre nosotras, admirarnos y echarnos porras, porque a veces entre nosotras mismas nos denigramos. Necesitamos más fuerza para poder comunicarnos mejor, y poder construir algo juntas, entre todas las mujeres sin distinción”.
“Tenemos la capacidad de llegar a liderazgos que antes no. Entonces, mi mensaje es ese: unirnos y levantarnos unas a otras. No somos enemigas”.