La ciudad pone en práctica el programa Movilidad Inteligente en la CDMX para mejorar el transporte público.

¿Te imaginas salir de tu casa y saber dónde y a qué hora va a pasar tu pesero? ¿Ahorrar combustible y dejar de esperar de más cuando cambias de transporte? Probablemente ese sueño pueda hacerse realidad gracias al internet de las cosas (IoT), el sistema que conecta objetos entre sí a través de dispositivos, una red y un sistema de control.

“En los últimos años estamos viendo cambios en el transporte gracias a la tecnología, pero estos modos solo están beneficiando a los pequeños grupos de población que utilizan taxis por aplicación y servicios de bicis y scooters, el grueso de personas que se mueve en transporte no estaba siendo considerado a pesar de ser mayoría”, dijo Gonzalo Peón, director de Proyecto del Instituto de Políticas para el Transporte y Desarrollo.

Para revertir la situación, el ITDP realizó un proyecto piloto de Movilidad Inteligente en la CDMX, para el que eligieron dos rutas de transporte concesionado (Villa de Aragón-Ceylán y Tepalcates-San Antonio Abad) comparables en cuanto a distancia, congestión y afluencia.

A las dos se les conectó el dispositivo Geotab, capaz de funcionar como geolocalizador y de bajar información de la computadora del vehículo, con la que se puede conocer el estado del motor, la velocidad de circulación, la ruta e incluso si el conductor usaba el cinturón de seguridad, esto con el objetivo de conocer el funcionamiento de las unidades.

“Lo que buscamos es apoyarnos de la tecnología para mejorar el transporte concesionado que es donde se mueve más de la mitad de las personas que circulan en la Zona Metropolitana, tratar de que sea visto como una opción viable frente a los automóviles y que además aporte beneficios ambientales, sociales, económicos y de seguridad”, dijo el director de Proyecto.

La prueba piloto de Movilidad Inteligente en la CDMX consistió en la activación de una alerta sonora configurada para avisar a los choferes cuando se excedía la velocidad permitida, se aceleraba o giraba de manera agresiva, si había una frenada intempestiva o si se dejaba el vehículo encendido sin movimiento durante un tiempo prolongado.

Además, se realizaron entrevistas a operadores, autoridades y encuestas de satisfacción del servicio a los usuarios.

Estos son los resultados de Movilidad Inteligente en la CDMX

La prueba piloto Movilidad Inteligente en la CDMX se aplicó de febrero a noviembre de 2018 en dos rutas de transporte concesionado, durante ese tiempo se documentó que al emitirse la alerta sonora, que avisaba a los operadores de una conducta no deseada y  cambiar el comportamiento, se logró reducir el consumo de 1.6 litros de diesel al día por autobús, lo que significa que tan solo en los 22 buses intervenidos, se podría evitar la emisión de 32 toneladas anuales de CO2 a la atmósfera.

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También lograron bajar en un 35% la frecuencia con la que se excede el límite de velocidades y se identificaron las unidades que continuamente abusan del acelerador. Incluso bajaron en 5 kilómetros por hora la velocidad máxima promedio de circulación, lo cual puede tener un impacto positivo en la prevención de lesiones y muertes por hechos de tránsito.

De acuerdo con Peón Carballo, estos resultados muestran que la movilidad inteligente en la CDMX puede beneficiar a empresarios, autoridades y a la sociedad, siempre y cuando se aplique de forma adecuada.

“Este tipo de información beneficia a las autoridades al convertirse en herramientas para implementar políticas públicas relacionadas con seguridad vial, medio ambiente y gestión del transporte; en los usuarios significaría reducir tiempos de traslado y tiempos de espera; mientras que las empresas se vuelven más eficientes, reducen gastos y gestionan mejor sus recursos”, dijo.

El sistema implementado en las unidades de transporte tiene un costo a de $400 al mes y se traduce en el ahorro de 1.6 litros de diesel equivalentes a $30 diarios. Si se multiplica por 22 días hábiles son $660 mensuales, por lo que la tecnología no significaría un impacto económico para los concesionarios, explicó el especialista.

Micros tendrán GPS

Durante la presentación de resultados del proyecto de Movilidad Inteligente en la CDMX, el titular de la Semovi, Andrés Lajous, recordó que de acuerdo con el Plan Integral de Movilidad de la CDMX, este año comenzará la instalación de los sistemas de localización GPS en todas las unidades de transporte concesionado, lo que permitirá conocer detalles de operación, zonas de mayor afluencia, patios de encierro y servir como monitoreo de seguridad para el sistema C5.

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“Nos hemos encontrado con que los concesionarios tienen información que se queda entre sus operadores o checadores y que podemos utilizar para mejorar las condiciones de viaje, además de que ponerles GPS nos va a ayudar a conocer el número exacto de unidades que hay en la ciudad, pues algunas operan con problemas en sus documentos. Con esos sistemas vamos a saber por dónde circulan, dónde hacen base y en dónde pasan la mayor parte del tiempo”, dijo.

El secretario de Movilidad adelantó que se diseñará un proyecto de movilidad inteligente para los taxis, con el que se podrán conocer los principales puntos de inicio de viajes de la ciudad, además de que se le pedirá a las empresas de transporte vía aplicaciones que compartan su información como lo han hecho las plataformas de bicis y scooters para tener un diagnóstico más completo de cómo se mueven los chilangos.