Depósitos anticipados, falsos propietarios y letras chiquitas son algunos de los fraudes inmobiliarios más comunes al comprar o rentar casas o departamentos.
Por ello, si quieres proteger tu dinero o inversión, es importante que sepas cómo operan los defraudadores, cómo evitar caer en engaños o simplemente cómo obtener aquello por lo que estás pagando.
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Chilango consultó a expertos en compra y renta de inmuebles u esto es lo que nos comentaron:
¿Cuáles son los fraudes inmobiliarios más comunes?
De acuerdo con Emilio Noriega, coordinador de Gowth de la plataforma especializada en renta Homie.mx, uno de los fraudes inmobiliarios más comunes tiene que ver con los depósitos:
“Te piden un depósito antes de mostrarte la propiedad y luego desaparecen”, explica.
Noriega agrega que en ocasiones las propiedades que se ofrecen para este fraude pueden ser inexistentes. También “te muestran propiedades que en realidad no están disponibles para renta y de igual manera solicitan un depósito”.
En el caso de la compra de propiedades, la situación se complejiza. Eduardo Orozco, CEO de la plataforma tecnológica inmobiliaria Alohome, comenta que cuando se trata de un desarrollo inmobiliario es necesario que los papeles de la propiedad que se adquiere estén en regla:
“Hay que tener cuidado en proyectos o inmuebles que no tienen el uso de suelo adecuado ni permisos tramitados y que comercializan estas propiedades sin tener los recursos para desarrollar el proyecto inmobiliario”, explica.
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¿Cómo evitar caer en fraudes inmobiliarios?
Ante este tipo de fraudes, los expertos recomiendan, antes que nada, no entregar dinero sin haber de por medio un contrato legal. También asegurarse de que se está tratando con el verdadero propietario de la cada o departamento.
“Debes solicitar documentos de propiedad, como escrituras o títulos de propiedad, y verificar la identidad del propietario a través de documentos de identificación válidos”, comenta Emilio Noriega.
Por su parte, cuando se trata de la adquisición de inmuebles, Eduardo Orozco recomienda investigar a los desarrolladores de los proyectos inmobiliarios. Se pueden revisar sus sitios web o redes sociales, así como visitar sus oficinas. También “visitar otros proyectos del desarrollador o constructora, pedir referencias y validar las entregas”.
Otro consejo imprescindible es revisar las ‘letras chiquitas’ de los contratos. Emilio Noriega explica que el caso de los contratos de renta, los puntos más importante son:
● La duración y términos del arrendamiento.
● Monto del alquiler y los incrementos futuros.
● Responsabilidades y derechos del arrendador y arrendatario.
● Condiciones de mantenimiento y reparación de la propiedad.
● Cláusulas de rescisión anticipada y penalizaciones.
Por su parte, Eduardo Orozco considera que en un contrato de venta o preventa hay que poner atención en:
- La descripción de la unidad, áreas, acabados, altura libre, equipamiento
- ¿Qué pasa si el proyecto cambia durante su construcción?
- Fecha límite: ¿qué pasa si no se termina construcción dentro de ciertos plazos?
- ¿Cómo me aseguro que me devuelvan mi dinero en caso de cancelación?
- Penalidades de ambas partes por incumplimiento
Ya sea que vayas a comprar o rentar, antes de firmar un contrato compara precios para evitar pagar de más.
Consejos para buscar asesoría
Comparar precios, revisar los antecedentes de los desarrolladores, verificar la identidad de los propietarios y que los papeles estén en regla puede ser una labor complicada y que requiere de conocimientos técnicos. La disponibilidad de tiempo también puede ser un impedimiento.
Por ello, contratar asesoría inmobiliaria podría ser una opción para simplificar todos los trámites y tener mayores garantías de que todo está en regla. En ese sentido, si contratas asesoría inmobiliaria, asegúrate de que los asesores estén registrados o tengan licencia. También consulta opiniones o referencias de otros clientes. Pide referencias y verifica rus redes sociales.
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