Lucharááán… contra COVID-19: cubrebocas para rudos y técnicos
Ante la cancelación de eventos por la crisis de COVID-19, el Hijo del Soberano comenzó a elaborar cubrebocas de lucha libre, la prenda de moda, de novedad.
Por: Andrés Rangel Garrido
Respetable público… ¡lucharán dos de tres caídas, sin límite de tiempo! En la esquina ruda el temido coronavirus y la desinformación, y en esta otra #SusanaDistancia, el lavado de manos y los cubrebocas de lucha libre.
Ante el desabasto de material sanitario en el país y debido a la necesidad de generar un ingreso, el reconocido luchador Hijo del Soberano empezó a fabricar de manera artesanal y bajo pedido cubrebocas de lucha libre.
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“Con la cancelación de los eventos de lucha libre en México, la semana antepasada tocamos fondo. No teníamos ni para comer mi familia y yo. No había trabajo. Nos la vimos muy difícil. Mi hermana nos ayudó con dinero y despensa. Esto del coronavirus COVID-19 nos agarró por sorpresa, por eso me vi obligado a encontrar otra fuente de ingreso, y la encontré a través de fabricar cubrebocas de lucha libre. Ahorita trabajo de 7:00 de la mañana a 11:00 de la noche”, explica el Hijo del Soberano.
La idea de elaborar estos cubrebocas comenzó luego de que el Hijo del Soberano, con experiencia de 19 años como luchador y 12 confeccionado equipo de lucha libre, decidió retomar una tradición de su familia, puesto que su madre es especialista en alta costura y ha hecho vestidos de novia y para XV años.
Actualmente, el Hijo del Soberano radica en Torreón, Coahuila, pero su trabajo es reconocido en toda la República Mexicana, incluso en el extranjero, pues exporta equipo a Costa Rica y Estados Unidos, donde es muy solicitado.
Sin embargo, con la crisis de COVID-19 en México, los chilangos son sus principales clientes, pues son quienes más pedidos de cubrebocas de lucha libre le han hecho. “Tengo pedidos de todo el país, pero no como la Ciudad de México, tan solo para la otra semana debo mandar más de 100 pedidos”, comenta.
Una de las razones por las que la CDMX es uno de sus mercados más importantes puede ser que la Ciudad de México es cuna de luchadores desde 1933, cuando se fundó la Empresa Mexicana de Lucha Libre (hoy Consejo Mundial de Lucha Libre). Además de que en la capital del país se encuentran la Arena México y la Coliseo, máximas casas de ese deporte en México, que han visto volar desde la tercera cuerda a figuras como el Santo, Blue Demon, El Huracán Ramírez, el Cavernario, Mil Máscaras, el Rayo de Jalisco, entre muchos otros.
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De qué estan hechos los cubrebocas de lucha libre
Los cubrebocas de lucha libre están fabricados con los mismos materiales que las máscaras y el equipo que usan los luchadores profesionales: vinil elástico, licra holograma y dos telas pegadas con aerosol, como refuerzo para mayor durabilidad y resistencia. Son 100 % lavables y ecológicos, pues sustituyen a las telas desechables de otros cubrebocas.
“Les hice tres pruebas para ver si al tenerlos puestos alguien podía apagar un encendedor soplando. No sabemos si pueden ayudar a prevenir los contagios, pero al menos sabemos que retienen las gotas de saliva”, explica el Hijo del Soberano.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda el uso de mascarillas y cubrebocas para aminorar el contagio de infecciones. No obstante, es importante señalar que ningún cubrebocas ofrece una barrera totalmente infranqueable.
Este luchador no solo fabrica cubrebocas de lucha libre brillosos, como las máscaras que utilizan los luchadores actuales, sino también comercializa modelos en acabados lisos o mate, como se usaban en los años 50.
Asimismo, fabrica modelos con figuras y símbolos de equipos de futbol soccer, futbol americano, béisbol, básquetbol e incluso de youtubers, como los Polinesios.
“Hay mucha competencia en el país, pero nosotros compramos de las mejores telas de la Ciudad de México, por eso ofrecemos la mejor calidad. He visto otros modelos que sinceramente no me convencen. A la gente le agrada mucho que sean tan resistentes y cómodos. En parte por eso me dediqué a hacerlos, para que la gente notara la diferencia en la calidad de los materiales y el trabajo de costura”, comenta.
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Costos y pedidos
Los cubrebocas de lucha libre cuestan entre 150 y 200 pesos, y hay dos tamaños: para niños y adultos. Se puede escoger un modelo ya hecho, o se pueden personalizar a gusto del cliente.
“Hacemos cubrebocas de cualquier luchador, color y forma que nos pidan, incluso si no son cubrebocas de lucha libre. El que nos han pedido más ahorita es el de Kemonito, pero también nos piden mucho del Santo y de Blue Demon, así como las mías, de mi hermano Euforia y del Hijo del Espectro Jr.”, confiesa el Hijo del Soberano.
El costo del envío varía dependiendo el estado de la República. Para la CDMX oscila entre los 250 y 350 pesos. Por eso, el Hijo del Soberano recomienda pedir por mayoreo, e incluso revenderlos aquí. “Cuando sientan la calidad de los materiales se darán cuenta que valen mucho más, incluso si los quieren conservar para colección”, argumenta.
Si te interesa comprar el tuyo, puedes contactarlos a través de Whatsapp al siguiente número: 871-127-3188, o a sus cuentas de Facebook: Equipos de lucha en la Laguna (Soberano) y en la de Hijo del Espectro Jr.
¿Cuándo usar cubrebocas? Esto dice la OMS
La Organización Mundial de la Salud recomienda el uso de cubrebocas cuando:
- Se atiende a alguien en quien se sospeche la infección por COVID-19.
- Si tiene tos o estornudos.
- Las mascarillas solo son eficaces si se combinan con el lavado frecuente de manos con una solución hidroalcohólica o con agua y jabón.
La recomendaciones para usar, quitarse y desechar los cubrebocas son:
- Antes de ponerte una, debes lavarte las manos con desinfectante a base de alcohol o con agua y jabón.
- Cubrir la boca y la nariz con la mascarilla y asegurarte de que no hay espacios entre su cara y la máscara.
- Evita tocar la mascarilla mientras la usas; si lo haces, lávate las manos con un desinfectante a base de alcohol o con agua y jabón.
- Cambia el cubrebocas tan pronto como esté húmedo y no lo reutilice las mascarillas de un solo uso.
- Para quitarse la mascarilla: quítala por detrás, es decir, no debes tocar la parte delantera; deséchela inmediatamente en un recipiente cerrado; y lávate las manos con un desinfectante a base de alcohol o con agua y jabón.
Los dos tipos de cubrebocas más usados son la máscara quirúrgica y la N95 o FFP2; estas son sus características principales:
Cubrebocas quirúrgico
- Son los usados habitualmente por la población.
- Están hechos de un papel fino que apenas filtra el aire. Puede ser traspasado fácilmente por las partículas portadoras de los virus.
- Su objetivo es evitar la transmisión de agentes infecciosos por parte de la persona que los lleva (protección en un sólo sentido), pues están diseñadas de dentro hacia fuera para evitar la diseminación de microorganismos presentes en la boca, nariz o garganta.
Máscaras N95 o FFP2
- Son más profesionales, suelen ser usadas por el personal de salud.
- Se adaptan a la forma de cada rostro, permitiendo un mejor sellado.
- Filtran el 95% de las partículas en suspensión de 0.3 micras de diámetro, por lo que serían más eficaces frente al nuevo coronavirus (que principalmente se transmite por gotas respiratorias mayores a 5 micras).
A continuación te compartimos algunas fotos de los cubrebocas de lucha libre.
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