El caso de leones en Iztacalco sigue dando de qué hablar, ya que después de que el propietario se negó a entregar a los animales, la PGR ahora tomará cartas en el asunto.
En fechas recientes los chilangos descubrimos que vivimos en una selva de asfalto, con todo y animales exóticos (literal). Hace tiempo el mono capuchino y semanas atrás una martucha, dieron la nota.
El caso de leones en Iztacalco salió a la luz esta semana. Desde el 10 de octubre se dio a conocer que tres de estos felinos, se encuentran en un domicilio ubicado en la colonia Viaducto Piedad, en Iztacalco. Desde entonces, la Profepa y la la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial de la CDMX (PAOT) tomaron el caso.
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Aunque el dueño aseguraba que tenía a los animales bajo cuestiones legales, la Profepa aseguró a tres leones y tres guacamayas. El plan era que todos los animales fueran trasladados a una unidad especializada en el manejo de este tipo de especies.
Sin embargo, el caso de leones en Iztacalco se hizo más complicado. El dueño se negó a entregar a los felinos a las autoridades, pues impidió —por segunda vez— las labores de contención y manejo.
Foto: Samantha Nolasco
Es por ello que ahora la PGR llevará el caso de leones en Iztacalco. Debido a eso, además de enfrentar el procedimiento administrativo de la Profepa, el poseedor deberá cumplir las sanciones en materia penal por no seguir las medidas de seguridad ordenadas por la autoridad.
Eso quiere decir que el poseedor podría recibir una multa de 20 a 5000 veces la Unidad de Medida y Actualización (UMA); es decir de $1,600 a $400,000 aproximadamente. Además, las sanciones de manera penal van de uno a cuatro años de prisión por delitos contra la biodiversidad y gestión ambiental.
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