La sequía en México sigue siendo una gran problemática y la muestra es la falta de agua que está viviendo la Ciudad de México, crisis que se ha acrecentado por la falta de lluvias, razón por la que las autoridades implementarán un bombardeo de nubes.
Y es que, de acuerdo con datos del Gobierno de México, en lo que va de 2023 se han registrado 21 por ciento menos precipitaciones respecto a años pasados. Por este motivo, las presas del Sistema Cutzamala se encuentran apenas al 47.6 por ciento de su capacidad; es decir, 23.1 por ciento menos respecto a su promedio histórico.
Te podría interesar: Cancelan concierto de Billie Eilish en CDMX por fuerte lluvia e inundación
Esta es la razón por la que el gobierno capitalino, encabezado por Claudia Sheinbaum, se ha visto en la necesidad de reducir el caudal y la presión para evitar que los niveles de las presas disminuyan rápidamente. Es aquí donde entra en juego la estrategia del bombardeo de nubes.
¿Cómo funciona el bombardeo de nubes?
La también conocida como siembra de nubes consiste en dispersar en el aire sustancias como yoduro de plata y dióxido de carbono congelado. Estas partículas tienen una estructura similar al hielo y al entrar en contacto con las nubes se juntan y crecen hasta hacer que el agua contenida caiga en formas de precipitaciones.
Para realizar el bombardeo se requiere que las partículas sean dispersadas mediante un avión. En este caso, será la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) la encargada de realizar el procedimiento, que comenzó este martes 28 de marzo.
Los bombardeos continuarán realizándose durante los meses de abril y mayo, con lo que se espera lograr un incremento de las precipitaciones que aumente los niveles del sistema Cutzamala para garantizar el abasto de agua en CDMX.
¿Garantizará el fin de la sequía?
La respuesta es que no, aunque sí ayudará a mitigar los efectos de la falta de lluvia. La cuestión es que esta medida no puede crear o fabricar las nubes, sino que necesita de ellas para buscar que haya una precipitación, según la Organización Meteorológica Mundial (OMN).
“La siembra de nubes podría ser una herramienta para aumentar los recursos hídricos, no se trata de un mecanismo destructor de sequías porque necesitamos nubes”, explicó Roelof Bruintjes, del Centro Nacional de Investigaciones Atmosféricas (NCAR) de los Estados Unidos de América y presidente del Equipo de expertos sobre modificación artificial del tiempo de la OMM.
La tarea fundamental para que sea funcional esta herramienta es encontrar las nubes “correctas” y depende de la temperatura. Es esencial determinar si las nubes en una región ya son eficientes o si es posible que la siembra de nubes pueda crear una diferencia.
A su vez, la localización de las nubes es también muy importante. Las nubes en los trópicos difieren de las nubes en latitudes medias porque la temperatura influye en el funcionamiento de los procesos nubosos.
“Además, las nubes en regiones diferentes con niveles diferentes de contaminación pueden también desarrollar precipitación de forma diferente, e incluso en una misma región dependiendo de la contaminación y de un día específico”, según Bruintjes. Cualquier cosa que altere las nubes puede afectar a la siembra de las mismas.
Échale un ojo a estos otros temas
¡Despierta, Tláloc! Así será el bombardeo de nubes para provocar lluvia en CDMX
¡Tláloc ya despertó! Se registra lluvia intensa, fuerte granizada y encharcamientos en la CDMX
