Los niños no fueron los únicos que regresaron a estudiar en este nuevo ciclo escolar.Aprovechando la educación a distancia, los abuelitos toman clases en televisión.

Al igual que millones de niños, Luz María Rosiles regresó a clases. A diferencia de los otros estudiantes, ella no lo hizo después de dos meses de vacaciones, sino que regresó tras más de siete décadas de ausencia. 

Actualmente, Luz vive en el Estado de México, pero nació en Guanajuato. Cuando ella era niña, el cuarto en el que vivía no tenía electrcidad y eso le dificultaba estudiar. Además, sus padres no tenían dinero para comprar los útiles. Esa situación obligó a la niña a abandonar la escuela cuando cursaba el cuarto grado de primaria. 

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Ahora, a sus 86 años, Luz ha encontrado en la educación a distancia una nueva oportunidad para retomar sus estudios.

Abuelitos toman clases en televisión

Debido a la pandemia por covid-19, el ciclo escolar 2020-2021 inició a distancia, con clases por televisión, principalmente. Esta situación ha sido aprovechada por los adultos mayores que decidieron reanudar sus clases de primaria o secundaria, las cuales suspendieron durante su juventud. 

“Ya aprendí a hacer las cuentas más sencillas y las de cuatro unidades. También he visto cómo tienes que prepararte para que no te enfermes con la pandemia, cómo usar el cubrebocas y cosas así”, explica orgullosa Luz, quien destina dos horas para tomar las clases correspondientes a cuarto de primaria.

En los últimos 70 años, Luz nunca se imaginó que podría retomar sus estudios, pero en cuanto se enteró que las clases se transmitirían por televisión, la señora se animó a cursar el cuarto de primaria. 

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No fue la única. Usuarios de redes sociales han compartido historias de cómo sus abuelos o familiares mayores se pusieron a estudiar algunas de las clases de educación básica. 

Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) revelan que en México la población ocupada mayor de 60 años es la que tiene menor nivel educativo. 

Las cifras establecen que cuatro de cada 10 adultos mayores (42.3%) tienen la primaria incompleta; mientras que sólo uno de cada 10 (15.4%) cuentan con educación media superior y superior. 

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“Voy a aprender hasta donde pueda”

Foto: Cortesía.

Además de aprender a hacer sumas y restas más complejas, Luz explica que estas clases le han servido para olvidarse de la pandemia. Debido a su edad y a la hipertensión que padece, la mujer de 86 años no puede salir de casa, así que pasa todos los días con su nieta, quien tiene el mismo nombre. 

“La verdad no me siento muy bien. Tanto tiempo encerrada, ya me siento desesperada. Extraño mucho salir. Quiero salir para que aunque sea me dé el aire”, explica. 

La señora señala que, por su edad, suele olvidar ciertas cosas que ve en sus clases en televisión; sin embargo, procura repasarlas constantemente para que no se escapen de su memoria.

Actualmente, su principal interés es estudiar matemáticas y aprenderse las figuras geométricas. “Aquí voy a estudiar hasta donde pueda. Mi familia dice que está muy bien que siga estudiando. A ver hasta dónde llego”, dice.

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