“Tururú”, “próxima estación”, los silbatos de los policías que anuncian el arribo del tren… ¿te has preguntado a qué suena el Metro de CDMX? Mientras esperas impacientemente a que llegue, un héroe sin capa trabaja en el anonimato para ponerle ritmo a tu viaje. Así es como se arma la playlist de música en el Metro.
La persona detrás de la música en el Metro es Dr. Decibel —como lo bautizó su jefa—, aunque para los demás es Emmanuel Zamacona. Gracias a él, J Balvin, Los Tigres del Norte, Los Ángeles Azules, Rockdrigo, Beyoncé o Tino el Pingüino suenan en las 576 pantallas instaladas en 70 estaciones con abundante afluencia.
Su trabajo podría parecer el mejor, sobre todo para un melómano. Sin embargo, dice, no es su única función, ya que se dedica a labores de publicidad para el Sistema de Transporte Colectivo, además de poner música en el Metro.
Tampoco se trata de poner la música que a él le gusta, sino de tomar en cuenta a todas las 3.3 millones de personas que viajan diariamente: desde niños hasta personas de la tercera edad que escuchan punk, rock hasta cumbias y banda. “Hay opiniones de todo tipo. El público del Metro es diferente en cada estación y, aunque es difícil complacer a cada uno, hacemos el intento”, dice Emmanuel.
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¿Cómo elige la música en el Metro?
Cada semana, Emmanuel busca y escoge 10 canciones en promedio, de las cuales 80% son estrenos. Indaga en las novedades de grandes discográficas y de las independientes, sigue revistas especializadas y monitorea constantemente a los artistas que la están “rompiendo”. Se basa también en su intuición.
Después manda la lista a aprobación, pues sus jefes deben revisar que los videos no tengan imágenes demasiado fuertes. Una vez que tiene el visto bueno, envía la playlist para programar. Aunque los videos están en loop, no ves la misma canción a la misma hora cada día.
Foto: Lulú Urdapilleta
Aproximadamente, 40% del contenido que hay en las pantallas del Metro por hora es música. Así que para Emmanuel sí hay cierta responsabilidad en elegir qué suena en el transporte. Además de estar al día en la música, “tratamos de dar empuje a nuevos talentos, para que la gente vea que también se hacen buenas cosas aquí”, cuenta.
“Me ha tocado ver a personas que dejan pasar el vagón para terminar de escuchar una canción. Por ejemplo, vi a un señor que se paró a ver un video de los Doors, cantaba la canción y eso, hasta cierto punto, da satisfacción”.
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